El Banco Central ruso demanda a la belga Euroclear por usar sus activos sin autorización
Moscú, 12 dic (EFE).- El Banco Central de Rusia (BCR) demandó al depositario belga Euroclear por el uso de sus activos sin el consentimiento de la parte rusa, informó este viernes el órgano regulador.
«El BCR presentó una demanda ante el Tribunal de Arbitraje de Moscú contra el depositario Euroclear con el objetivo de obtener una indemnización por los daños causados» por el manejo de sus activos sin el consentimiento de la parte rusa, explican las autoridades financieras en su web.
El órgano, presidido por Elvira Nabiúlina desde 2013, sostiene que las decisiones de Euroclear «causaron daños al BCR debido a la incapacidad de gestionar el efectivo y los valores pertenecientes» allí depositados.
En un comunicado anterior de hoy las autoridades rusas defienden que las decisiones de la Comisión Europea sobre la propuesta de préstamo para las reparaciones a Ucrania son ilegales por el uso de activos ajenos sin consentimiento.
Por lo tanto, su aplicación «supondrá la impugnación incondicional por parte del BCR de cualquier acción directa o indirecta que conduzca al uso sin autorización de los activos del Banco de Rusia ante todas las autoridades competentes disponibles», explican.
«El BCR se reserva el derecho de llevar, sin previo aviso, a la práctica todos los mecanismos legales, así como de otro tipo que estén disponibles, para proteger sus intereses en caso de un mayor progreso o cualquier forma de implementación de las iniciativas de la Unión Europea antes mencionadas», añaden.
La Comisión Europea espera una decisión por parte de los países de la UE para expropiar 210.000 millones de euros en activos rusos, de los cuales 185.000 millones están congelados en el depositario belga Euroclear.
Anteriormente, Euroclear se ha mostrado contrario a la confiscación de los activos rusos llamando la atención a que ello llevaría a Rusia a confiscar activos europeos o belgas en el país que está en guerra con Ucrania.
Moscú, por su parte, advirtió repetidamente de que tomaría represalias por la expropiación de sus bienes.
Por otro lado, Rusia ya inició en los últimos años una nacionalización de empresas occidentales presentes en el país alegando excusas como que compañías de sectores estratégicos estaban controladas por personas extranjeras o que financiaban al bando ucraniano.
Ayer, la Fiscalía General rusa exigió la confiscación de los activos de AgroTerra, propiedad de un grupo estadounidense, con una capitalización estimada de 73.000 millones de rublos (918 millones de dólares). EFE
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