
El Tesoro de Argentina afronta test en el mercado de deuda tras revés electoral de Milei
Buenos Aires, 9 sep (EFE).- El Tesoro de Argentina afrontará este miércoles su primer test en el mercado de deuda doméstico tras el duro revés electoral sufrido el pasado domingo por el partido del presidente Javier Milei.
En la primera de las dos licitaciones de deuda programadas para septiembre, el Tesoro ofrecerá letras y bonos con el objetivo de captar fondos para hacer frente a vencimientos inminentes de títulos de deuda.
Según el llamado a licitación publicado este lunes por la Secretaria de Finanzas argentina, el Tesoro ofrecerá este miércoles cinco series de letras y dos de bonos, con vencimientos entre el 31 de octubre próximo y finales de marzo de 2026.
El Tesoro realiza este tipo de colocaciones programadas unas dos veces por mes y su objetivo es captar fondos para refinanciar vencimientos de deuda y absorber la liquidez excedente de pesos argentinos en el sistema con el fin de moderar las presiones sobre el tipo de cambio.
Estas presiones cambiarias se reactivaron el lunes pasado, tras la derrota del partido gobernante en los comicios legislativos en la provincia de Buenos Aires, la más poblada de Argentina.
Aunque inicialmente los vencimientos a refinanciar esta semana ascendían a casi 17 billones de pesos (11.930 millones de dólares), esa carga bajó sustancialmente después de que el pasado viernes el Tesoro canjeara títulos que estaban en manos del Banco Central.
Tras ese canje, los vencimientos de letras que operan el próximo viernes y están en manos de privados ascienden a unos 7,2 billones de pesos (unos 5.000 millones de dólares).
De no lograr una refinanciación del 100 % de los compromisos, el Tesoro cuenta con depósitos por 12,5 billones de pesos para hacer frente al vencimiento del viernes.
Elevadas tasas de interés
Aún con la reducción de los compromisos a refinanciar, el mercado está expectante por el resultado de esta operación ya que en las últimas licitaciones el Tesoro se ha visto obligado a convalidar crecientes tasas de interés en su intento por absorber la liquidez de pesos en el sistema financiero y tratar de contener el alza en el precio del dólar, que este martes cerró en 1.325 pesos para la venta al público.
En la última licitación, realizada el 27 de agosto, el Tesoro logró refinanciar todos los vencimientos pero convalidó tasas efectivas de hasta el 75,6 % anual, muy superiores a la inflación proyectada de aquí a un año, del 20,9 %, según el más reciente informe de expectativas de mercado publicado mensualmente por el Banco Central.
Las licitaciones del Tesoro se han sucedido con resultados dispares desde que en julio pasado el sistema financiero se viera alterado por la decisión del Gobierno de desactivar las Letras Fiscales de Liquidez (LEFI), que eran el instrumento usado por el Banco Central para absorber la liquidez de pesos argentinos entre entidades bancarias y evitar las presiones sobre el tipo de cambio.
A partir de esa decisión, el Tesoro intentó absorber la liquidez de pesos mediante nuevas operaciones de colocación de deuda entre los bancos, pero en algunas de estas subastas lo logró solo parcialmente y convalidando cada vez mayores tasas de interés.
Como complemento a estas operaciones para absorber liquidez, el Banco Central también subió los encajes bancarios -el porcentaje de depósitos que las entidades financieras deben mantener inmóvil, sin destinarlo a otras operaciones financieras-.
Desde el desarme de las LEFI el pasado 10 de julio, las tasas de referencia del sistema financiero argentino han crecido en forma sostenida.
«Tras el desarme de las LEFI, las tasas de interés exhibieron una marcada volatilidad y se mantienen en niveles históricamente elevados en términos reales, lo que resulta insostenible para la actividad en el mediano plazo», observó la consultora Invecq en un informe.
La tasa Tamar (tasa de depósitos de referencia en el mercado mayorista) saltó del 39,12 % efectivos anual el 10 de julio al 86,5 % este lunes, mientras que la tasa Badlar (tasa para depósitos a plazo fijo en los bancos privados) pasó del 37,69 % al .71,5 % actual.
El aumento de las tasas ha hecho encarecer el crédito para hogares y empresas, lo que, según han advertido consultores privados, terminará por impactar negativamente en el nivel de actividad económica, que ya ha mostrado signos de estancamiento en los últimos dos meses.
Aún así, el Gobierno parece estar dispuesto a tolerar un enfriamiento de la economía a cambio de reforzar su estrategia para mantener a raya la inflación y el dólar, sobre todo de aquí a las elecciones legislativas nacionales del 26 de octubre, un período para el que se avizoran crecientes tensiones financieras. EFE
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