Expresidente filipino Joseph Estrada sale de la UCI y sobrevive a la covid-19

Bangkok, 14 abr (EFE).- El expresidente filipino Joseph «Erap» Estrada, de 83 años, ha salido de la unidad de cuidados intensivos en la que permaneció nueve días al agravarse una neumonía provocada por la covid-19.

«Mi padre ha vuelto a una habitación normal y será trasladado al área del hospital para pacientes no covid en unos días», informó el miércoles en su cuenta de Facebook su hijo y exsenador Jinggoy Estrada.

Jinggoy explicó que su padre ya dio negativo de covid-19 en una prueba el martes y que éste aún requiere oxígeno, pero no de alto flujo, para poder respirar, por lo que deberá permanecer hospitalizado unos días más.

El expresidente fue trasladado de urgencia el 28 de marzo al hospital, donde dio positivo por covid-19. Fue sedado y trasladado a la unidad de cuidados intensivos el 4 de abril, e intubado a un ventilador para poder respirar al día siguiente, cuando se temió por su vida.

Estrada -que cumplirá 84 años la semana que viene- fue un popular actor de filmes de acción de serie B en los setenta y ochenta, una fama que aprovechó para dar el salto al sillón presidencial de Filipinas, que ganó en 1998 con un fuerte respaldo de votos y una agenda populista.

PRESIDENTE ENCARCELADO

Sin embargo, Estrada no terminó su mandato por los escándalos de corrupción y una revuelta popular pacífica lo expulsó del poder en 2001 antes incluso de que se abriera un proceso judicial contra él ese mismo año por aceptar sobornos del juego ilegal, apropiación de fondos de los impuestos del tabaco y cobro de comisiones ilegales.

Después de tres años encarcelado en un hospital militar, consiguió que el tribunal autorizara su traslado a la lujosa residencia familiar situada en las afueras de Manila, donde cumplió arresto domiciliario tres años más.

En 2007 fue condenado a cadena perpetua por corrupción, una sentencia de jamás cumplió porque a los pocos días fue indultado por la presidenta Gloria Macapagal Arroyo, que fue la vicepresidenta durante los tres años de Estrada al mando del país.

Aunque el perdón presidencial estaba condicionado a que «Erap» renunciara a sus aspiraciones políticas, en 2009 anunció su candidatura a las presidenciales que se celebraron al año siguiente, en las que quedó en el segundo puesto, detrás de Benigno Aquino.

Estrada sí logró convertirse en 2013 en alcalde de Manila con una campaña de nuevo populista basada en combatir el alto índice de criminalidad y el desempleo, puesto que ocupó dos mandatos, hasta 2019. EFE

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