
Fallece peruana con esclerosis a la que un tribunal aceptó retirarle el soporte vital
Lima, 5 may (EFE).- María Benito, una paciente peruana con esclerosis lateral amiotrófica de 66 años que solicitó rechazar un tratamiento médico que prolongaba su vida artificialmente, falleció este viernes, después de que la Justicia aceptara su petición de acceder a una muerte digna, informó este domingo su abogada. «El viernes, 3 de mayo, María Teresa Benito Orihuela ejerció finalmente su derecho a una muerte digna a través del retiro de medidas de soporte vital, previa sedación paliativa. María (…) partió durmiendo, conforme a su voluntad», indicó un comunicado compartido por una de sus abogadas, Josefina Miró Quesada, que consideró este el segundo caso de acceso a una muerte digna en Perú. Detalló que el procedimiento médico fue realizado «en cumplimiento de la sentencia firme emitida por la Tercera Sala Constitucional de la Corte Superior de Lima» que, en febrero de 2024, ordenó al seguro social Essalud «respetar y garantizar la decisión libre e informada de María de rechazar los tratamientos médicos que prolongaban artificialmente su vida y la hacían sufrir en demasía». La información difundida señaló que, tras la histórica sentencia a favor de Ana Estrada, que fue la primera peruana en acceder a la eutanasia el 21 de abril, el caso de María Benito es el segundo en este país sobre el derecho a una muerte digna. Estrada, de 47 años, sufría polimiositis, una enfermedad degenerativa e incurable que debilita los músculos y que la mantuvo conectada a un respirador artificial. Tras una larga batalla judicial, accedió a la eutanasia mediante un procedimiento médico que se realizó conforme al Plan y Protocolo de Muerte Digna, ratificado por la Corte Suprema peruana el 14 y 27 de julio de 2022. El comunicado de este domingo sostuvo que la solicitud de Benito siempre estuvo amparado en la Ley General de Salud, su reglamento y el Código de Ética Médica, y que la sentencia a su favor «ratificó que rechazar un tratamiento médico- incluido si es de soporte vital- es parte de un derecho fundamental». «María tuvo que enfrentar un proceso judicial innecesario frente a la negativa infundada de EsSalud de respetar su decisión. Tras cinco meses de litigio, este proceso finalmente le dio la razón», agregó. Recordó que Benito vivió más de diez años con esclerosis lateral amiotrófica, una enfermedad incurable, progresiva y degenerativa, que la inmovilizó totalmente. «A pesar de las barreras que enfrentó en un contexto de sufrimientos, nunca bajó la guardia. María nos enseñó a que dejar partir es también una forma de amar y que morir es parte de la visa, aunque no se guste hablar de ello», añadió. EFE pbc/gdl/psh