Festival de Tango en Basilea
A partir de este jueves (28.03) la escuela basilense de tango organiza su tercer festival.
Para la noche inaugural, bailarines de Basilea prepararon un “baile de animales” en el ambiente de un típico salón tradicional.
Creación de los immigrantes europeos, que a fines del siglo XIX buscaban su suerte en el puerto de Buenos Aires, el tango desde sus principios fue una danza urbana.
Hacia 1910 el tango llegó a los salones parisienses y de allí se extendió a toda Europa. El “baile de animales” quiere revivir esa atmósfera y los rituales del tango tradicional.
El sábado, 30 de marzo, el Sexteto Canyengue se presenta con su concierto “Tango Máxima”. La orquesta, fundada en Holanda en 1988, figura entre las mejores del mundo.
El sexteto tocó en la boda del príncipe holandés Willem-Alexander con la ciudadana argentina, Máxima; de allí el nombre del concierto presentado en Basilea. Influencias del pop, jazz, salsa, música clásica y contemporánea caracterizan el estilo las interpretaciones del Sexteto.
Bailar toda la noche
Durante la velada del domingo, el sexteto acompañará con su música a los bailarines de tango. Las estrellas de esa noche de baile serán las parejas integradas por Gustavo Naveira y Giselle Anne, Julio Balmaceda y Corina de la Rosa, Eduardo Cappussi y Mariana Flores, de Buenos Aires.
El cierre del evento tendrá lugar en la sala grande de la Volkshaus (Casa popular).
Durante el festival, el restaurante de la Volkshaus será un punto de encuentro. La diseñadora argentina Mona Estecho, especializada en moda de tango, presentará sus nuevos modelos.
El tango en Basilea
La escuela basilense de tango existe desde hace casi quince años. Sus directores, Cécile Sidler y Romeo Orsini, empezaron a bailar cuando Astor Piazzolla a principios de los años 80, hizo revivir el tango en Europa.
La pareja fundó la Asociación Danzaria, la escuela de tango y organizó las primeras milongas. Durante los primeros años participaron unas 15 parejas en talleres que ahí contribuyeron a perfeccionar el arte del tango.
Las escuelas de tango, surgidas en Amsterdam, Berlín o Zúrich se organizaron para invitar a maestros y músicos argentinos.
En 1997, la película “Tango Lesson” desató una ola de euforia, el tango ganó popularidad y renombre, también en Basilea.
“Hace cinco años el número de alumnos se multiplicó repentinamente. Ahora tenemos entre 200 alumnos y tres parejas maestras. En Basilea somos unos 500 bailarines activos”, comenta Romeo Orsini a swissinfo.
Con muchos éxitos en sus primeras dos ediciones, el festival reunirá a los aficionados de toda la región de Basilea, aprovechando el puente de Pascuas. El encuentro concluye el primero de abril.
Franziska Nyffenegger, Basilea
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