
Gobierno luso avisa que cambio en Ley de Extranjeros no será la última reforma migratoria
Lisboa, 16 oct (EFE).- El Gobierno de Portugal (centroderecha) advirtió este jueves de que la modificación de la Ley de Extranjeros, que fue promulgada hoy por el presidente del país, Marcelo Rebelo de Sousa, y que limita entre otros la reagrupación familiar, no será la última reforma migratoria.
Con la promulgación de la nueva versión de esta legislación, hoy es «un día muy importante para el país, es un capítulo importantísimo de cambio en la política de inmigración, ahora regulada, con más control, más seguridad, pero también con más dignidad para quien llega», dijo el portavoz del Ejecutivo, António Leitão Amaro, en una rueda de prensa tras la reunión semanal del Consejo de Ministros.
Avisó de que este «no es el primer capítulo ni el último de ese cambio en la política de inmigración» y recordó que el año pasado el Gobierno ya terminó con «las puertas abiertas» de la llamada «manifestación de interés», un sistema que permitía solicitar la residencia y legalizar la situación de los extranjeros que tuviesen al menos un año de cotización en la Seguridad Social.
Sobre las próximas medidas, anticipó que la próxima semana «se aprobará» el cambio de la Ley de Nacionalidad, también impulsado por el Ejecutivo del primer ministro portugués, Luís Montenegro, y que actualmente está siendo evaluada por el Parlamento, que todavía no ha fijado una fecha para debatirla en el pleno ni para votarla.
Algunas modificaciones de esa propuesta es poner fin de la ciudadanía por nacimiento y aumentar el periodo mínimo de residencia legal para optar a la nacionalidad de 5 a 7 años para los nacionales de países lusófonos y 10 años para los ciudadanos de otros lugares.
Por otro lado, Leitão Amaro agregó que en noviembre «se darán las condiciones» para analizar otra iniciativa gubernamental para modificar el régimen para deportar a extranjeros del país que se encuentren en situación ilegal.
La nueva Ley de Extranjeros, promulgada este jueves y que fue aprobada en el Parlamento a finales de septiembre con el apoyo del partido de ultraderecha Chega, entre otros, limita la reagrupación familiar de los migrantes en general, además de establecer restricciones para la obtención de la residencia temporal para los extranjeros procedentes de países de habla portuguesa.
Sobre esta última alteración, Leitão Amaro detalló que a partir de ahora para lograr la residencia temporal los nacionales en esos países lusoparlantes tienen que llegar con visado de residencia solicitado en origen.
«No basta con venir a Portugal a hacer turismo y luego se verá, venir con una exención de visado y luego se verá», apuntó el portavoz, quien agregó que para viajar a Portugal para residir hay que «venir a trabajar o estudiar».
Agregó que con el nuevo texto se acaba también con «el visado de búsqueda de trabajo indiscriminado, eso de ir a Portugal a buscar trabajo y luego se verá, eso ha acabado».
«El (visado) de trabajo se reserva solo para las profesiones, las funciones, con elevada cualificación donde haya una oferta laboral evidente y necesaria para la economía nacional», dijo.
Rebelo de Sousa promulgó hoy la modificación de la Ley de Extranjeros después de haber enviado una primera versión al Tribunal Constitucional, que acabó viendo riesgo de inconstitucionalidad en algunos puntos, por lo que el Ejecutivo tuvo que introducir algunos cambios, especialmente relativos a las excepciones en la reagrupación familiar para que no vuelva a ocurrir lo mismo.EFE
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