
Hamás recuerda asesinato de Sinwar un año después: «Duerme tranquilo, Israel no lo logró»
Jerusalén, 16 oct (EFE).- El grupo palestino Hamás recordó este jueves, un año después de su asesinato, a su exlíder Yahya Sinwar, a quien le aseguraron que Israel «no ha logrado sus objetivos agresivos en la orgullosa tierra de Gaza y se ha visto obligado, humillado, a un alto el fuego».
«En el primer aniversario de tu martirio, Abu Ibrahim duerme tranquilo. (…) El enemigo no ha logrado sus objetivos agresivos en la orgullosa tierra de Gaza y se ha visto obligado, humillado, a un alto el fuego», aseguró el grupo islamista en un comunicado.
El 17 de octubre de 2024, Israel confirmó que había asesinado al máximo líder de Hamás, Yahya Sinwar, considerado el cerebro de los ataques múltiples del 7 de octubre y el hombre más buscado por Israel en la Franja.
Los últimos momentos de vida de Sinwar fueron grabados por un dron israelí. El moribundo líder aparece en las imágenes con el rostro tapado y arrojando un palo; unas imágenes que sirvieron para engrandecer su figura entre los palestinos.
Hamás aseguró además que, a pesar de su muerte, el pueblo de Palestina «ha alcanzado un logro nacional y un acuerdo que frustró todos los planes de la ocupación», refiriéndose al acuerdo de alto el fuego que entró en vigor el pasado día 10 de octubre y al canje de rehenes y prisioneros.
«Este acuerdo estipula el fin de la agresión, la guerra de genocidio, el hambre, el desplazamiento y la limpieza étnica, y logra un acuerdo de intercambio de prisioneros» en el que 1.968 prisioneros y detenidos palestinos fueron excarcelados.
Nacido en un campo de refugiados en Jan Yunis, en el sur de la Franja de Gaza, Sinwar fue elegido líder de Hamás en el enclave palestino en 2017 y, en agosto de 2024, tras el asesinato de Ismail Haniyeh, le reemplazó como máximo líder de la organización islamista.
Sinwar, quien cumplió desde los 25 años cuatro cadenas perpetuas en cárceles israelíes por ejecutar a palestinos «colaboracionistas» con Israel, fue capaz de perfeccionar su hebreo durante su reclusión, escribir libros y estudiar manuscritos sobre teóricos y políticos sionistas. Él mismo decía que quería aprender todo sobre el «enemigo»; en referencia a Israel.
En 2004, Israel le salvó la vida tras una cirugía cerebral de emergencia para extirparle un tumor potencialmente mortal y, en 2011, lo puso en libertad como parte de un acuerdo de intercambio de 1.027 presos palestinos por Gilad Shalit; un soldado israelí cautivo durante cinco años en Gaza. EFE
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