Justicia de Mali impone administración provisional a la filial de Barrick Gold

Bamako, 16 jun (EFE).- El Tribunal de Comercio de Bamako ordenó este lunes la puesta bajo administración provisional maliense de la filial de la minera canadiense Barrick Gold, propietaria, junto con el Estado de Mali, de uno de los complejos auríferos más importantes del mundo.

Según informaron a EFE fuentes judiciales, el Tribunal designó a un contable maliense para encabezar el comité encargado de la gestión temporal de la empresa, sin ofrecer más detalles al respecto.

La decisión marca un nuevo episodio en el prolongado conflicto legal entre el Gobierno de Mali y Barrick Gold, que ha llevado su disputa con las autoridades al arbitraje internacional.

Fuentes cercanas al caso señalaron que la empresa canadiense está decidida a proseguir su batalla legal contra las políticas adoptadas por el Ejecutivo maliense, lo que sugiere que el conflicto está lejos de resolverse.

Esta situación aumenta la incertidumbre en el sector minero de Mali, en un contexto de tensiones crecientes entre el Estado y las compañías extranjeras activas en su territorio.

En diciembre pasado, la Justicia maliense emitió una orden de arresto contra el director general de Barrick Gold, Mark Bristow, por presunto blanqueo de capitales.

Además, las autoridades detuvieron a cuatro empleados malienses de la empresa, que comparte con el Estado la propiedad del complejo aurífero de Loulo-Gounkoto, uno de los más importantes del mundo, situado en el sur del país.

La Justicia también dictó una orden de arresto contra el director general maliense del complejo, Cheikh Abass Coulibaly, por los mismos cargos.

Barrick Gold posee el 80 % del complejo de Loulo-Gounkoto, mientras que el 20 % restante pertenece al Estado maliense.

En 2023, el jefe de la junta militar, general Assimi Goita, introdujo un nuevo código minero que otorga al Gobierno la posibilidad de adquirir hasta el 35 % de participación en los proyectos mineros y obliga a todas las empresas extranjeras a renegociar sus contratos vigentes. EFE

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