La inmigración judía a Israel cae tras el estallido de la guerra contra Hamás en Gaza
Jerusalén, 28 dic (EFE).- La inmigración de personas de origen judío a Israel -que pueden obtener ciudadanía en base a la llamada Ley del Retorno- cayó en gran medida los últimos meses, desde el estallido de la guerra entre Israel y Hamás el pasado 7 de octubre.
Según la Oficina Central de Estadísticas, 1.163 personas se instalaron en Israel en octubre, una cifra mucho menor en relación a las 2.364 personas que se establecieron en el país en septiembre.
En noviembre, el número de inmigrados aumentó a 1.534, pero siguió manteniéndose por debajo en comparación a meses previos a la guerra.
En octubre de 2022, los llegados a Israel para hacer ‘Aliá’ -denominación que se da a la inmigración a Israel de personas de origen judío- fueron más de 6.000.
Según la Oficina Central de Estadística, la tasa de crecimiento de población de este 2023 ha sido del 1,9%, y gran parte del aumento se debió al propio crecimiento demográfico natural entre su ciudadanía.
Sin embargo, «la tasa de crecimiento disminuyó en comparación con 2022, cuando el aumento fue del 2,2%», lo que implica una reducción este año que se debe a la disminución de la inmigración.
En 2022, Israel recibió una cifra récord de 70.000 nuevos inmigrantes, la más alta en 23 años, en gran parte de Ucrania y Rusia. Muchos salieron de estos países tras el conflicto desatado por la invasión rusa de Ucrania a finales de febrero de 2022.
En comparación, este 2023, 45.000 personas inmigraron a Israel, y enero -con 7.664 nuevos inmigrantes- fue el mes con cifras más altas. El Estado judío tiene en torno a 9,5 millones de ciudadanos.
Desde que se aprobara en 1950, la Ley de Retorno permite la migración a Israel a cualquier persona con padre, madre o al menos uno de sus abuelos de origen judío. EFE
jma/ad
© EFE 2023. Está expresamente prohibida la redistribución y la redifusión de todo o parte de los contenidos de los servicios de Efe, sin previo y expreso consentimiento de la Agencia EFE S.A.