
Los sindicatos franceses piden el fin del ajuste presupuestario, «museo de los horrores»
París, 18 sep (EFE).- Los sindicatos franceses, que esperan una participación «masiva» en la jornada de huelgas y manifestaciones de este jueves, exigen la retirada del ajuste proyectado para 2026 por el recién caído Gobierno, descrito como «un museo de los horrores» y reclaman «unos presupuestos más justos».
«El mundo del trabajo no puede ser el único que contribuya a los esfuerzos», ha subrayado Marilyse Léon, la secretaria general de la principal central del país, la Confederación Francesa Democrática del Trabajo (CFDT), en una entrevista al canal BFMTV, en el que ha criticado como «un museo de los horrores» y «un catálogo inadmisible» los presupuestos que preparaba François Bayrou.
El anterior primer ministro, que tuvo que dimitir tras perder una moción de confianza el pasado día 8 precisamente sobre sus presupuestos, había diseñado un recorte del déficit de cerca de 44.000 millones, sobre todo mediante la congelación de las prestaciones sociales y del sueldo de los funcionarios, recortes en algunos servicios públicos y la supresión de dos días festivos.
Léon ha exigido que el nuevo Ejecutivo que debe formar el nuevo primer ministro, Sébastien Lecornu, abandone ese proyecto y elabore «unos presupuestos que sean justos» desde el punto de vista social, fiscal y ecológico.
La jornada de protestas de hoy «es una forma de decir que el mundo del trabajo tiene que pesar» las decisiones del gobierno, ha indicado la líder de esta central conocida por sus posiciones reformistas, antes de recordar algunas de sus reivindicaciones, como la aplicación del conocido como ‘impuesto Zucman’, que gravaría con un 2 % a los que tienen un patrimonio de más de 100 millones de euros, alrededor de 1.800 contribuyentes.
«No es justo que los multimillonarios paguen menos impuestos en proporción que una enfermera», ha explicado en referencia a diferentes estudios económicos que muestran que los ultrarricos abonan en impuestos un porcentaje de sus ganancias inferior al de muchos asalariados.
También ha pedido la suspensión de la aplicación de la reforma de las pensiones de 2023, que está elevando progresivamente la edad mínima de la jubilación de 62 a 64 años y que se controlen más los más de 200.000 millones de euros de ayudas a las empresas.
«Las empresas tienen que rendir cuentas», ha afirmado Léon, que considera que ahora la pelota está «en el Gobierno» que tiene que «abandonar dogmas que se mantienen desde hace años» y en particular «la rebajas de impuestos» que «han conducido a esta situación» de las finanzas públicas.
Francia tiene una deuda pública del 114 % del producto interior bruto (PIB) y un déficit disparado, del 5,8 % en 2024, que casi duplicaba el límite del 3 % fijado por las reglas europeas.
Desde el segundo sindicato francés, la Confederación General del Trabajo (CGT), su secretaria general, Sophie Binet, desde una posición más dura ha ido más lejos en sus exigencias, y así por ejemplo ha dicho que «para salir de la crisis democrática, para no caer en una crisis de régimen, hay que derogar la reforma de las pensiones».
En otra entrevista a la emisora France Info, Binet ha defendido igualmente el ‘impuesto Zucman’, pero también un nuevo impuesto sobre la fortuna (suprimido desde 2018, con la llegada de Emmanuel Macron al Elíseo) y un gravamen a las operaciones de autocompra de acciones que llevan a cabo muchas empresas en lugar de pagar dividendos, y que es una forma de evitar las retenciones fiscales
La responsable de la CGT ha puesto como ejemplo de lo que querría que hiciera el Gobierno francés lo que está haciendo el de Pedro Sánchez en España.
«La situación en España es de un crecimiento floreciente», ha destacado después de recordar que se ha incrementado el salario mínimo en un 80 %, se ha reducido la deuda en porcentaje del producto interior bruto (PIB) gracias a la rápida progresión de la actividad y se está discutiendo de la reducción del tiempo de trabajo.
«Es una política de la demanda -ha precisado- mientras Emmanuel Macron ha llevado a cabo una política de la oferta». EFE
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