
Lukashenko consuma la salida de Bielorrusia del tratado de fuerzas armadas convencionales
Moscú, 29 may (EFE).- El presidente de Bielorrusia, Alexandr Lukashenko, promulgó este miércoles la ley que suspende la participación del principal aliado de Rusia en el Tratado de Fuerzas Armadas Convencionales en Europa (FACE).
«Suspender la vigencia del tratado FACE del 19 de noviembre de 1990», señala el documento publicado en el portal legal del Estado bielorruso.
La ley fue aprobada a mediados de abril por la cámara baja y seguidamente por el Senado de Bielorrusia, que considera que después de que la OTAN renunciara en 2023 a participar en el tratado, su preservación, aunque sea formal, carece de todo sentido.
La suspensión del Tratado por Bielorrusia, país donde Moscú desplegó armas nucleares tácticas en 2023, supone que dejará de informar a sus firmantes sobre el armamento convencional en su territorio y no permitirá visitas de inspección.
Rusia utilizó el territorio de Bielorrusia para cruzar la frontera con Ucrania en los primeros días de su campaña militar en el país vecino, que considera a Lukashenko cómplice de la agresión rusa.
Lukashenko y el presidente ruso, Vladímir Putin, acordaron en su reciente reunión en Minsk reforzar la cooperación en materia de seguridad ante la amenaza que representa la OTAN, al que acusan de acercar su infraestructura militar a sus fronteras.
Putin, que invitó a Minsk a participar en las recientes maniobras nucleares tácticas, también aseguró que para el Kremlin la seguridad de Bielorrusia es igual que la de Rusia.
Rusia, que había suspendido el FACE en 2007 en medio del creciente antagonismo con Occidente, abandonó definitivamente el tratado en noviembre del pasado año, entre otras cosas por la implicación directa de la OTAN en el conflicto en Ucrania, así como por el ingreso de Finlandia en el bloque occidental.
Moscú indicó que junto con el FACE perdieron su vigor otros dos documentos: el Acuerdo de Budapest de 1990, que fijaba los topes de armamento para cada uno de los países del Pacto de Varsovia, y el Acuerdo de 1996 que limitaba la cantidad de fuerzas en los flancos tras la desaparición de la Unión Soviética.
El FACE, considerado en su tiempo como la piedra angular de la seguridad europea, eliminó la ventaja cuantitativa de la Unión Soviética en armas convencionales en Europa.
El documento original fue firmado por 22 países de la OTAN y la Unión Soviética, pero la versión actualizada nueve años después para reflejar la ampliación de la Alianza Atlántica y la disolución del Pacto de Varsovia ya no fue ratificada por los entonces 30 aliados.EFE
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