Opositor Umaro Sissoco Embalo gana presidenciales en Guinea Bissau

El candidato de la oposición en Guinea Bissau, el exprimer ministro Umaro Sissoco Embalo, fue proclamado este miércoles ganador de las presidenciales de este pequeño país de África del Oeste, una victoria impugnada por su adversario del partido mayoritario, Domingos Simoes Pereira, que denuncia «fraude».
Embalo, de 47 años, logró compensar los 12 puntos que le sacó de ventaja su rival en la primera ronda, y ganó por siete, con 53,55% de los votos en la segunda vuelta del domingo, según la Comisión Nacional Electoral.
Escenas de júbilo estallaron cerca del hotel, bajo estricta vigilancia policial, donde se anunciaron los resultados de la elección, que tuvo una participación del 72,67%.
Pereira, también exprimer ministro y jefe del Partido Africano para la Independencia de Guinea y Cabo Verde (PAIGC), obtuvo el 46,45% de los votos.
«Los resultados provisionales que fueron proclamados están llenos de irregularidades, de nulidad y manipulaciones, que (constituyen) un fraude electoral. Tal resultado no podemos aceptarlo», declaró Pereira ante seguidores, en la sede de su partido.
«Traeremos todas las pruebas que demuestren que los resultados han sido cambiados» en favor de Embalo, añadió el jefe del PAIGC, anunciando un «recurso de anulación» previa consulta con sus asesores jurídicos.
Mientras tanto, los simpatizantes de Embalo festejaban la victoria en el centro de la capital Bissau, haciendo sonar bocinas y cacerolas, cantando y danzando.
«Seré un presidente de la concordia nacional. La euforia de la campaña terminó. Necesito de todos para crear una nueva Guinea-Bissau», aseguró Sissoco Embalo, del partido MADEM -disidente del PAIGC-, en la sede de su partido.
– «El pueblo necesidad estabilidad» –
La ONU felicitó a las autoridades electorales por el proceso y llamó a «todos los militantes a seguir dando muestras de moderación durante el periodo postelectoral», en un comunicado el miércoles de su jefe en África occidental y en el Sahel, Mohamed Ibn Chambas.
«Las elecciones se desarrollaron bien. Un candidato ganó. Tendrá muchas responsabilidades en estos momentos difíciles por los que atraviesa Guinea-Bissau», declaró a la AFP Elisa Pinto, observadora miembro de una red de organizaciones de la sociedad civil.
El nuevo presidente «debe responder a las preocupaciones del pueblo y el pueblo necesita estabilidad y reconciliación nacional. Sin eso no puede haber desarrollo», añadió.
Embalo obtuvo 28% en la primera vuelta, contra 40,1% de Pereira.
Pero en la segunda ronda contó con el apoyo de los principales candidatos eliminados, entre ellos el presidente saliente José Mario Vaz -cuarto puesto en la primera vuelta-.
Embalo es un general de brigada de reserva, exprimer ministro (2016-2018) del presidente Vaz, especialista en asuntos de defensa y geoestratégicos. Fue representante en África Occidental de un fondo de inversión libio.
En sus carteles de campaña, en sus mítines y en las boletas de voto, este hombre políglota llevaba un ya famoso keffieh rojo y blanco. Sus partidarios siguen llamándolo «el general», aunque dejó el ejército en los años 1990.
– Obligado a negociar con el Parlamento –
Embalo, vicepresidente del MADEM, es padre de tres hijos, musulmán casado con una cristiana. Ha criticado con vehemencia la gestión del PAIGC, partido que dirigió la lucha por la independencia de Portugal en 1974 y dominó la vida política desde entonces.
El desafío de las elecciones era poner fin al estancamiento político.
Guinea Bissau, pequeño país de 1,8 millones de habitantes, ha estado sumido en una crisis durante cuatro años a causa de los desacuerdos entre el PAIGC y el presidente José Mario Vaz.
Desde su independencia ha sufrido frecuentes golpes de Estado, el último en 2012, liderados por un ejército que durante mucho tiempo ha estado muy involucrado en la vida política y vinculado al tráfico de cocaína desde América Latina.
El jefe del Estado Mayor, general Biague Na Ntam, afirmó que los militares permanecerán esta vez en los cuarteles.
Mientras el Madem esté en la oposición, Embalo deberá en primer lugar negociar con una asamblea dominada por el PAIGC. Según la Constitución, el Parlamento tiene derecho a nombrar al primer ministro, aunque el presidente puede destituirlo.