
Seúl propone a EE. UU. cooperación manufacturera antes del fin de la prórroga arancelaria
Seúl, 7 jul (EFE).- Corea del Sur ha propuesto a Washington un marco de cooperación manufacturera mutuamente beneficioso durante su última ronda de negociaciones, en la que también se discutió la posibilidad de extender la suspensión de los aranceles «recíprocos», a dos días de que expire la moratoria vigente.
En la reunión entre el jefe negociador comercial surcoreano, Yeo Han-koo, y el representante comercial estadounidense, Jamieson Greer, celebrada el sábado (hora de Washington), el lado surcoreano dijo que dicha cooperación serviría para consolidar las cadenas de suministro entre ambos países, en línea con la «renovación industrial» que impulsa EE. UU., según informó el Ministerio de Comercio surcoreano en un comunicado.
Yeo subrayó que cualquier acuerdo final, aparte de los «aranceles recíprocos» del 25 %, debe incluir la eliminación o reducción de los gravámenes sobre los automóviles y el acero surcoreanos.
Seúl manda a sus pesos pesados
En paralelo a las negociaciones comerciales lideradas por Yeo, el asesor de seguridad nacional de Corea del Sur, Wi Sung-lac, viajó a Washington el domingo para mantener consultas con sus homólogos estadounidenses y potencialmente con el secretario de Estado de EE. UU., Marco Rubio, sobre la agenda bilateral.
Durante su estancia de tres días, Wi tiene previsto abordar tanto la posibilidad de organizar una cumbre entre el presidente surcoreano, Lee Jae-myung, y el estadounidense, Donald Trump, como el esquema arancelario estadounidense.
Wi señaló en declaraciones el domingo que su visita llega en una fase crítica para profundizar las consultas en materia de comercio y seguridad, subrayando que su misión forma parte de los esfuerzos integrales del Gobierno para gestionar la situación.
Enfoque en barreras no arancelarias
Según un funcionario comercial surcoreano, la ronda de negociaciones realizada a finales de junio se centraron principalmente en barreras no arancelarias, dado que Seúl aplica aranceles casi nulos a las importaciones estadounidenses en virtud de su tratado de libre comercio.
El jefe negociador comercial surcoreano ha destacado que el sector digital es una de las áreas más importantes dentro de las negociaciones arancelarias en curso con Estados Unidos.
Sectores de Washington han expresado su preocupación, reflejada en una carta firmada por más de 40 congresistas a principios de julio, sobre las propuestas legislativas surcoreanas, advirtiendo que estas medidas, que consideran similares a la Ley para Mercados Digitales europea, discriminarían a empresas como Google, Apple y Meta mientras favorecen a rivales chinos.
Otros desacuerdos relacionados son las restricciones de Corea del Sur al acceso a datos de ubicación por parte de Google y Apple.
El Ministerio de Comercio surcoreano también ha señalado que Estados Unidos quiere mejor acceso en el sector agrícola, automotriz y digital en las negociaciones actuales.
También se han llegado a mencionar aspectos energéticos, como la eventual participación surcoreana en un proyecto de gas natural en Alaska y, a través de otros canales, cuestiones de los costos de defensa por el mantenimiento de las tropas estadounidenses en Corea del Sur y políticas de tipo de cambio.
Se acerca la fecha ‘límite’
La Administración Trump comenzará a enviar cartas oficiales a los socios comerciales a partir de este mismo lunes (hora estadounidense, martes en horario local), notificando los nuevos aranceles o reconociendo acuerdos bilaterales alcanzados, mientras espera resolver la «mayoría de las negociaciones» para el 9 de julio.
Sin embargo, Washington ha afirmado que la entrada en vigor de los aranceles está prevista para el 1 de agosto. El secretario de Comercio, Howard Lutnick, ha sugerido que, en algunos casos, se podría seguir negociando hasta finales de julio.
El presidente surcoreano, Lee Jae-myung, ya había expresado la semana pasada sus dudas de que las negociaciones pudieran concluir antes de la fecha límite de julio.
Impacto económico
El impacto potencial de los aranceles en la economía surcoreana preocupa especialmente en Seúl, dada su alta dependencia de las exportaciones a EE. UU., que representan más del 18 % del total.
Según estimaciones del banco central surcoreano, la aplicación total de los aranceles podría restar entre 0,3 y 0,4 puntos al crecimiento del producto interior bruto (PIB) este año.
Las ventas en EE. UU. de fabricantes como Hyundai y Kia ya mostraron en junio señales de desaceleración por la incertidumbre comercial, mientras expertos advierten de que sectores clave como los automóviles, los semiconductores y las baterías dependen directamente del acceso al mercado estadounidense. EFE
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