
Veinte años de viñetas de Mahoma, origen de la mayor crisis internacional para Dinamarca
Copenhague, 30 sep (EFE).- La publicación de las famosas doce caricaturas del profeta Mahoma por el diario danés Jyllands-Posten, que dieron origen a la mayor crisis internacional en la historia reciente de Dinamarca, cumple este martes veinte años.
El miedo a dibujar a Mahoma entre artistas daneses, por temor a posibles represalias de los islamistas, fue el motivo esgrimido por este diario conservador para encargar a doce caricaturistas otras tantas viñetas con el profeta como protagonista, que fueron publicadas el 30 de septiembre de 2005.
Las caricaturas provocaron una oleada de críticas en la comunidad islámica danesa, que meses más tarde se extendieron por todo el mundo musulmán, ocasionando un boicot a productos daneses y ataques contra embajadas de Dinamarca en varios países.
Dinamarca se vio envuelta en la peor crisis política desde la Segunda Guerra Mundial y el Gobierno tuvo que realizar una campaña diplomática sin precedentes en el mundo islámico, con reuniones al más alto nivel, buscando calmar la situación.
El ejecutivo danés, encabezado entonces por el liberal Anders Fogh Rasmussen (luego secretario general de la OTAN), se vio obligado a modificar su intransigencia inicial, que le había llevado a rechazar una reunión sobre el tema con un grupo de embajadores islámicos, a los que acusaba de querer convertirlo en censor y desconocer la libertad de expresión.
El conservador Jyllands-Posten, alineado con la dura política en inmigración (y en especial con los musulmanes) del Gobierno, rechazó disculparse, mientras se sucedían las muestras de apoyo, y medios de otros países, como la revista francesa Charlie Hebdo, reproducían los dibujos o impulsaban iniciativas parecidas.
«Las imprimiría Jyllands-Posten hoy de nuevo si pudiese ir atrás en el tiempo? Por supuesto», escribe hoy este medio en un editorial, defendiendo que su propósito era «desafiar al miedo y la autocensura» y achacando la responsabilidad de la crisis a «los fanáticos que instigaron durante meses el jaleo, las hogueras y los incendios».
El diario danés ha declinado sin embargo publicarlas de nuevo hoy aludiendo a motivos de seguridad, por la amenaza que asegura todavía pesa sobre él y sus trabajadores.
El propio Jyllands-Posten fue objeto de varios atentados frustrados en los años posteriores a la crisis, y el más famoso de sus dibujantes, Kurt Westergaard, autor de un dibujo de Mahoma con un turbante-bomba, escapó a un intento de asesinato en su casa.
Quien sí ha reproducido hoy una de las viñetas en su edición impresa es el liberal Berlingske, quien compara a los dibujantes y los promotores de las caricaturas con «canarios en una mina de carbón que reaccionaron frente a algo peligroso en el aire».
Las viñetas fueron «un aviso de los profundos conflictos de valores surgidos en nuestra sociedad a causa de décadas de inmigración de países musulmanes», señala Berlingske en un editorial. EFE
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