China registró en 2016 una fuerte alza de los casos de corrupción juzgados por los tribunales chinos, anunció este domingo el presidente del Tribunal Supremo, que reiteró que la campaña anticorrupción iba a continuar.

En 2016, los tribunales trataron 45.000 casos de corrupción que implicaban a 63.000 personas, contra sólo 34.000 en 2015, señaló Zhou Qiang, presidente del Supremo en el informe anual enviado al Parlamento chino.

Desde que llegó al poder en 2012, el presidente chino, Xi Jinping, lanzó una campaña contra la corrupción, que algunos expertos califican de purga.

Zhou señaló por otra parte que las "sanciones severas que reprimen el crimen de poner en peligro la seguridad nacional" cometido por los defensores de los derechos humanos era uno de los principales avances del año 2016.