
Dos muertos y nueve heridos tras un atropello con fuga en la ciudad china de Kunming
Pekín, 21 jul (EFE).- Dos personas murieron y otras nueve resultaron heridas después de que un conductor embistiera con su vehículo a peatones y ciclistas en una céntrica calle de la ciudad de Kunming, capital de la provincia de Yunnan (suroeste), informó este lunes la División de Tráfico de la Policía local.
El suceso tuvo lugar hacia las 13:16 hora local del domingo (05:16 GMT) en la calle Jinbi, en el distrito de Xishan, cuando el conductor, un hombre de 49 años identificado como Li y residente de la ciudad, arrolló a un ciclista y a varios peatones que transitaban con normalidad.
El individuo se dio a la fuga y, durante su huida, colisionó con otros vehículos y personas.
La Policía logró detener al sospechoso poco después. Según la versión oficial, se ha descartado que condujera bajo los efectos del alcohol o drogas.
Las autoridades calificaron el caso como un «atropello con fuga» y mantienen abierta una investigación para determinar los motivos del suceso.
Las nueve personas heridas, cuatro con lesiones leves y cinco con heridas superficiales, fueron hospitalizadas y se encuentran en estado estable, según precisaron las autoridades.
En los últimos años se han multiplicado en China los ataques indiscriminados contra multitudes, ya sea con vehículos o armas blancas, aunque en este caso aún no se ha confirmado que el atropello entre en esa categoría, ya que las autoridades continúan investigando.
Entre los casos más recientes figura el atropello masivo ocurrido en noviembre de 2024 en la ciudad sureña de Zhuhai, que dejó 35 muertos y más de 40 heridos, y que fue atribuido a una disputa personal del autor, que fue ejecutado el pasado 20 de enero tras recibir la condena a la pena capital en diciembre.
Estos episodios son comúnmente descritos por la prensa y autoridades como casos de “venganza contra la sociedad”, en los que individuos frustrados por problemas personales descargan su ira contra personas inocentes.
La Fiscalía Popular Suprema prometió recientemente “castigos severos, estrictos y rápidos” para los responsables de este tipo de crímenes, mientras que el Ministerio de Seguridad Pública ha llamado a reforzar las tareas de prevención para “mantener la estabilidad social”.
Expertos apuntan a la falta de atención en salud mental, la censura informativa y la creciente presión social como factores que podrían estar detrás de estos actos.
Estos sucesos contrastan con el mensaje habitual de las autoridades chinas, que sostienen que el país es «uno de los más seguros del mundo», una percepción hasta ahora ampliamente compartida por la ciudadanía. EFE
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