
Kenia niega implicación militar en la guerra de Sudán y subraya su papel de mediador
Nairobi, 16 jun (EFE).- El Gobierno de Kenia negó este lunes cualquier implicación militar en la guerra de Sudán y subrayó su papel de mediador neutral para lograr la paz, después de que medios locales aseguraran que munición con etiquetado keniano había aparecido en ese país devastado por el conflicto desde 2023.
«Kenia apoya el proceso de paz a través de la IGAD (Autoridad Intergubernamental para el Desarrollo de África Oriental). Cualquier otra afirmación es mera conjetura», declaró a los periodistas en Nairobi el portavoz del Gobierno keniano, Isaac Mwaura.
«Kenia no es el artífice de la guerra de Sudán. Nos comprometemos a fomentar el diálogo», subrayó Mwaura, al incidir en que Kenia defiende una «solución pacífica» y prioriza «el diálogo, la negociación y la mediación como herramientas para la resolución del conflicto».
El portavoz hizo esas declaraciones después de que el diario keniano Daily Nation asegurara haber identificado cajas de municiones etiquetadas como kenianas dentro de un supuesto depósito de las Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR), que luchan contra el Ejército sudanés, cerca de la recientemente recuperada capital sudanesa, Jartum.
En respuesta, el Ministerio de Defensa de Kenia negó al periódico cualquier relación con las armas.
«Tras examinar las fotografías proporcionadas, deseamos manifestar que no reconocemos las cajas ni las inscripciones que contienen», declaró el Ministerio de Defensa.
Pese a que fue a finales de marzo cuando se anunció la liberación de la capital sudanesa, no fue hasta el pasado 20 de mayo cuando el Ejército controló totalmente el estado de Jartum.
La guerra en Sudán ha provocado la muerte de decenas de miles de personas y el desplazamiento de alrededor de 13 millones.
También ha dividido, a grandes rasgos, el país en dos: el norte, este y centro, controlado por el Ejército, y la vasta región occidental de Darfur, en manos de los paramilitares, mientras que amplias zonas del sur están en disputa. EFE
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