
La comunidad cristiana en Túnez, entregada a la popular Virgen de Trapani
Túnez, 15 ago (EFE).- Decenas de fieles cristianos se congregaron este viernes en la localidad costera de La Goleta, en Túnez, en torno a Nuestra Señora de Trapani -cuya denominación tiene su origen en la ciudad italiana del mismo nombre-, en una procesión con más de un siglo de tradición, ejemplo de la diversidad cultural y religiosa en un país mayoritariamente musulmán.
Como si de un ritual se tratara, igual que cada 15 de agosto, la imagen de la virgen recorrió un pequeño trayecto de La Goleta, conocida antiguamente como la ‘Pequeña Sicilia’, donde los asistentes participaron de una misa en la iglesia católica de San Agustín, ubicada un antiguo barrio judío.
Con velas, flores y ofrendas que portaron hasta la iglesia, los fieles pidieron, como ya es tradicional, sus pequeños deseos, algún milagro o asuntos más terrenales y cotidianos, como salud y trabajo.
El culto a Nuestra Señora de Trapani fue importado a Túnez por la comunidad siciliana que vivió en el país hasta los 60, década en la que la población católica comenzó a abandonar el país norteafricano.
Ante la salida de un gran número de italianos y la inestabilidad política, esta celebración se abandonó entonces durante más de medio siglo, hasta que se retomó en 2017, aunque de manera más austera y con recorrido menor, que se limita a las inmediaciones del templo.
El 15 de agosto, también se rinde homenaje a Nuestra Señora de Trapani en Casablanca, Marruecos, en la iglesia italiana de Cristo Rey, donde se conserva otra copia de la imagen de mármol de la ‘madonna’, cuyo culto se asocia con las comunidades de pescadores y migrantes sicilianos que han mantenido el vínculo con su patria. EFE
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