Manneken Pis se viste de arlequín y bañista en el cincuentenario de la muerte de Picasso

Paula Jiménez Belmonte

Bruselas, 25 oct (EFE).- El Manneken Pis, la pequeña estatua de un niño meón, uno de los emblemas de Bélgica, se vistió este miércoles de arlequín y bañista en honor a las obras de Picasso y en conmemoración del cincuentenario de su muerte.

Con un traje de arlequín estampado con rayas azules y blancas que se asemejan a los trajes de bañistas, la prenda confeccionada para el Manneken Pis hace honor a algunas de las obras que realizó el pintor español en su trayectoria, en las cuales retrató precisamente estas figuras.

«He querido aunar las obras más destacadas de Picasso a través de la figura traviesa del Manneken Pis. No se ha usado ningún producto animal ni ningún producto nuevo. Tampoco he usado máquina de coser, he intentado que todo fuera vintage», destacó a EFE la diseñadora española Aroa Chao, encargada de confeccionar el traje.

Tras tres semanas de confección, cosiendo a mano y con materiales reciclados, Aroa Chao elaboró el atuendo para la escultura del querubín, ubicada en los aledaños de la Grand Place de Bruselas.

¿Por qué de arlequín y bañista?

Tras su vuelta de Italia, Picasso mantuvo su vena expresionista, y es en este contexto cuando la figura del arlequín cobra protagonismo, pues el pintor la utiliza como una reflexión sobre su propia imagen y su desarraigo de la sociedad.

En cuanto a los bañistas, se trata de un cuadro realizado en 1918 durante el periodo cubista del artista, que retrató los colores vibrantes de los trajes de baño siguiendo la moda de la época, recreada en los diseños de Coco Chanel, con quien colaboró para el diseño de vestuario de dos obras del dramaturgo Jean Cocteau.

El embajador de España en Bruselas, Alberto Antón Cortés, destacó durante la presentación de la prenda «el impacto en el mundo del arte» de Picasso, cuyo talento «no se limitó a un movimiento concreto, sino que fue un movimiento de sí mismo».

Detrás de la pequeña estatua se añadió un panel en honor a una de las obras más conocidas de Picasso, el Guernica, el gran lienzo testimonio de lo que supuso la Guerra Civil española y que retrató el bombardeo sufrido por la ciudad del País Vasco el 26 de abril de 1937.

«Dados los hechos que estamos viviendo en las últimas semanas, me parece fantástico que la hayáis incluido en este vestuario, es un recordatorio muy necesario», señaló la representante de la ciudad de Bruselas e historiadora Anais Maes.

No se trata del primer traje que celebra la figura de un pintor español, pues en 2010 el Manneken Pis ya homenajeó a Goya con un traje, algo que repitió el 12 de octubre de 2022 por la Fiesta Nacional de España.

Tampoco es la primera vez que el querubín acomoda su atuendo a efemérides o sucesos notables españoles, pues ya se ha vestido de peregrino compostelano, de futbolista del Athletic de Bilbao, de jugador del Atlético de Madrid, de pastor catalán, de torero, de llanisco o de sanitario español con un traje elaborado en el Hospital 12 de Octubre de Madrid, entre otros.

El Manneken Pis viste cada año entre 20 y 30 nuevos prendas, a petición de asociaciones, países o regiones cuyas solicitudes son examinadas por las autoridades, y tras el día en cuestión, pasan a formar parte del museo de la célebre estatua.

El año 2023 ha sido declarado Año Picasso, y el traje ha sido creado como parte de las actividades conmemorativas de la Celebración Picasso 1973-2023, es decir, por el cincuentenario de la muerte del pintor. EFE

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