Oxfam considera un «hito» el informe del G20 sobre la crisis global de desigualdad
Nairobi, 4 nov (EFE).- El informe sobre desigualdad global encargado por el G20 y dirigido por el premio Nobel de Economía Joseph Stiglitz, que advierte de que el 1 % más rico del planeta acaparó entre 2000 y 2024 el 41 % de toda la nueva riqueza generada, marca «un hito en el reconocimiento internacional de la crisis de desigualdad», afirmó este martes la ONG Oxfam.
«Este informe histórico no podría llegar en un momento más oportuno (…). La emergencia de la desigualdad está destruyendo nuestras democracias, corroyendo nuestras sociedades y debilitando nuestras economías», señaló en un comunicado el director ejecutivo de Oxfam, Amitabh Behar.
El estudio, elaborado por encargo de la Presidencia sudafricana del G20 (grupo de países desarrollados y emergentes), revela que en los últimos veinticuatro años la riqueza promedio del 1 % más rico aumentó en 1,3 millones de dólares, frente a los 585 dólares del 50 % más pobre.
El informe también propone crear un Panel Internacional sobre la Desigualdad, que estaría concebido como un órgano técnico centrado en datos y análisis, para orientar las políticas públicas en materia de igualdad a nivel global y nacional.
Oxfam calificó esta iniciativa como una «propuesta excelente y largamente esperada”, que aportará la misma “rigurosidad científica y determinación» para afrontar la crisis de desigualdad que el Panel Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, en inglés) «ha mostrado en la lucha contra el colapso climático».
«Los gobiernos tienen ahora una medida sensata, práctica y basada en la evidencia científica que pueden adoptar para reducir la desigualdad, y que también les beneficiará», subrayó Behar, quien expresó su confianza en que «varios gobiernos del G20» reconocerán la magnitud de la crisis y apoyarán la creación del panel.
No obstante, advirtió de que la próxima cumbre del G20, prevista para los días 20 y 21 de noviembre en Johannesburgo (Sudáfrica), se celebrará en un contexto de “agitación geopolítica sin precedentes, mientras Estados Unidos alimenta activamente la desigualdad dentro y fuera de sus fronteras, desde aranceles irresponsables hasta recortes fiscales regresivos”.
«Pero esto deja más clara la elección para los gobiernos: entre un orden internacional diseñado para servir a las personas comunes o uno controlado por oligarcas», concluyó Behar. EFE
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