Policía keniana dispara a quemarropa a un hombre en protestas por la muerte de un bloguero

Nairobi, 17 jun (EFE).- El caos se desató este martes en el centro de Nairobi cuando decenas de manifestantes que salieron a las calles para exigir justicia por la muerte de un bloguero bajo custodia policial fueron dispersados con gas lacrimógeno por la Policía keniana, que disparó a quemarropa a una persona en la cabeza.

Según reportan medios locales y se puede ver en imágenes difundidas en redes sociales, dos agentes de Policía golpearon y uno de ellos luego disparó en la cabeza a la víctima, que era un vendedor callejero y a quien la prensa keniana da por muerto.

La víctima fue trasladada por los propios manifestantes a un centro médico cercano, que rehusó confirmar a EFE el fallecimiento del vendedor.

«Nos podemos facilitar esa información», se limitó a declarar a EFE un portavoz del centro médico Bliss, adonde fue evacuada la víctima.

La jornada empezó con unas decenas de manifestantes gritando consignas como «Ruto debe irse» (William Ruto, presidente del país) o «Lagat debe irse» (Eliud Lagat, subinspector general de la Policía keniana).

Pero, poco después, matones blandiendo bastones de madera y que superaban en gran número a los manifestantes invadieron el centro de la ciudad, subidos en motocicletas en grupos de dos o tres.

Mientras la Policía arrojaba constantemente gas lacrimógeno y no detenía a los matones, algunos de ellos fueron vistos apaleando a manifestantes y tirando piedras, según pudo constatar EFE.

Activistas kenianos aseguraron que el Estado pagó a estos individuos venidos de barrios pobres de la ciudad para que sabotearan las protestas y algunos manifestantes se enfrentaron a ellos y quemaron una de sus motocicletas.

Aunque no se conocen cifras de heridos, EFE pudo ver varias ambulancias y al menos un vehículo de la Cruz Roja keniana.

«Hemos llegado a un punto en que ya no es seguro ser keniano. Las agencias estatales monitorizan todo lo que dices en redes sociales y, aunque no hayas cometido ningún crimen, te hacen desaparecer y lo siguiente que sabemos es que te encuentran muerto en el bosque o en un río», dijo a EFE un joven manifestante de 23 años, que quiso mantener el anonimato por miedo a represalias.

«Y ahora son tan descarados que pueden arrestarte formalmente y matarte en una comisaría», añadió.

En Mombasa (sureste), la principal ciudad de la costa keniana, una veintena de personas marcharon también contra la violencia policial, mientras otro grupo de similar tamaño protestó en la localidad también costera de Kilifi con una gran pancarta con mensajes como «Dejen de matarnos» o «Acaben con la brutalidad policial».

El bloguero y maestro de 31 años Albert Ojwang murió presuntamente por una herida en la cabeza, compresión en su cuello y heridas en otras partes del cuerpo, que apuntarían a una agresión, según reveló la autopsia.

Esto contradice la versión policial según la cual Ojwang murió tras golpearse en la cabeza él mismo en su celda durante la noche del 7 al 8 de junio, tras ser detenido por publicar supuesta información «falsa» en la red social X sobre el subinspector Lagat.

Este jueves, Lagat anunció que ha decidido apartarse de su cargo hasta que acaben las investigaciones sobre el caso. EFE

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