
Policía de Ecuador detiene a un sospechoso de lanzar una bomba artesanal durante protestas
Guayaquil (Ecuador), 19 oct (EFE).- La Policía ecuatoriana detuvo este domingo a un hombre por ser el supuesto responsable de lanzar una bomba incendiaria de fabricación artesanal a las fuerzas de seguridad durante los enfrentamientos que se registraron en la localidad de Calderón, de la provincia de Pichincha, en el marco de las protestas contra el Gobierno del presidente Daniel Noboa.
De acuerdo a la institución policial, los agentes llegaron a una vía que estaba bloqueada por manifestantes, quienes estaban quemando llantas y posteriormente la protesta se volvió «violenta».
«Durante la intervención, varios individuos lanzaron piedras, palos y objetos incendiarios tipo bomba molotov contra el personal uniformado. Uno de los agresores fue identificado por su vestimenta y accionar violento, quien arrojó un artefacto incendiario artesanal, que puso en riesgo la integridad física de policías y ciudadanos presentes», detalló la Policía en un comunicado.
El hombre fue detenido posteriormente por agentes que ingresaron violentamente a una vivienda y se lo llevaron mientras se escuchaba a unas mujeres gritar: «cuidado, hay niños», de acuerdo a un video publicado por organizaciones de la sociedad civil.
Los policías salen de la casa, cierran la puerta, tiran al hombre al piso y empiezan a golpearlo nuevamente.
La Fundación Regional de Asesoría en Derechos Humanos (Inredh) denunció que durante las protestas, las fuerzas de seguridad habían incursionado de manera violenta en las comunas Santa Anita y San Miguel del Común, ubicadas al norte de Quito, «territorios ancestrales y espacios de soberanía colectiva».
Y que habían realizado detenciones «sin causa clara, con uso excesivo de la fuerza y vulnerando los principios de necesidad, proporcionalidad y legalidad». «La irrupción violenta del Estado constituye una grave violación a los derechos humanos y a la integridad territorial, protegidos por la Constitución y tratados internacionales», añadió Inredh.
A la expectativa del diálogo
Mientras que los enfrentamientos se intensificaron cerca de Quito, en la provincia de Imbabura, que hasta el momento ha sido el epicentro de las protestas indígenas que iniciaron tras la eliminación del subsidio al diésel, también se mantuvieron cerradas al menos ocho carreteras.
Para este lunes estaba previsto que inicien las mesas de diálogo que se anunciaron el pasado miércoles, después de que el Gobierno dijo que había alcanzado una tregua con líderes indígenas Imbabura, sin embargo, hasta la noche de este domingo no había una convocatoria oficial sobre ese tema.
Ese acuerdo con el Gobierno no fue aceptado por las comunidades, quienes al día siguiente señalaron que «el paro sigue», algo que también fue respaldado por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), que convocó a las protestas hace casi un mes, ya que sus líderes no fueron parte de las conversaciones.
Si bien las protestas indígenas comenzaron por el rechazo a la eliminación del subsidio al diésel, luego la Conaie incluyó la exigencia de la bajada en tres puntos del Impuesto al Valor Agregado (IVA) hasta el 12 % y la liberación de los detenidos durante las manifestaciones.
Así mismo, la Conaie agregó en el paro su rechazo al referéndum del próximo 16 de noviembre, en el que, entre otras cosas, se preguntará -por iniciativa del presidente Noboa- sobre la instalación de una Asamblea Constituyente para redactar una nueva Constitución, lo que ha llevado al Gobierno a señalar a la protesta como «política». EFE
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