Aplaudido y criticado, se marcha el jefe de COSUDE
Walter Fust dejará en abril de 2008 el mando de la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación (COSUDE). Hasta ese momento la habrá dirigido durante quince años.
A los 62 años, este gran conocedor de los engranajes federales que puso su sello personal a la política de cooperación de Suiza, fue también objeto de críticas.
El Consejo Federal (Gobierno) fue informado este miércoles (12.09) que el director de COSUDE pasará a la jubilación anticipada desde fines de abril de 2008. En un comunicado, el Ministerio de Asuntos Exteriores, del cual depende COSUDE, destaca la labor de Walter Fust al señalar que ésta fue “reconocida más allá de las fronteras helvéticas”.
El anuncio surge pocos meses después de que Walter Fust no fuera elegido para dirigir el Programa Mundial de Alimentos. Él aspiraba a coronar su carrera con un destino internacional, pero debió resignarse ante la designación del candidato de Estados Unidos, principal donador de la agencia onusiana. El diplomático de San Gall no ocultó entonces su decepción.
“Octavo consejero federal”
Walter Fust, citado a menudo como el “octavo consejero federal”, dirige COSUDE desde 1993. La Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación cuenta con un prespuesto anual de casi 1.300 millones de francos para sus proyectos de cooperación al desarrollo y de asistencia humanitaria.
Su nombramiento provocó reacciones. Edmond Kaiser, fundador de la ONG Terre des Hommes y de la Asociación Sentinelles declaró en aquella ocasión que Walter Fust era “un desconocido” en los medios de la ayuda humanitaria.
Hasta el fin de su mandato, Walter Fust, conocido por su integridad y una impresionante agenda con “personas que cuentan”, suscitará polémica.
La última se remonta a diciembre de 2006, tras la publicación de un informe de la Comisión de Gestión de la Cámara alta del Parlamento sobre la administración de COSUDE.
El director de COSUDE reaccionó con visible molestia y reprochó a esta comisión de haber empleado cifras erróneas. Acto seguido, fue llamado al orden por su jefa, la ministra de Asuntos Exteriores Micheline Calmy-Rey, a cuyo juicio “hubiera sido mejor callarse”.
Al final de los años 1990, Walter Fust ya había suscitado críticas por haber lanzado, junto con Grecia y Rusia, la operación humanitaria bautizada “Focus” para ayudar a las víctimas de la guerra en Yugoslavia. Una iniciativa mal vista por por el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).
Opuesto al “maquillaje”
Más allá de las polémicas, Peter Niggli, director de la comunidad de ONG suizas Alianza Sud, considera que Walter Fust “ha hecho mucho por la cooperación suiza al desarrollo”.
Cita sobre todo que el director de COSUDE se opone a los artificios “superficiales” para mejorar, sobre el papel, el porcentaje asignado por Suiza a la cooperación al desarrollo.
Mencionados en febrero por el diario de Ginebra “Le Temps”, el relator de la ONU para el derecho a la alimentación Jean Ziegler y el ex consejero federal Adolf Ogi, asesor especial de la ONU para el Deporte, no escatimaron elogios a la labor de Walter Fust.
“Es un visionario si se trata de las relaciones Norte-Sur”, dijo entonces Jean Ziegler. “Es un verdadero administrador que tiene el valor de tomar decisiones”, señaló a su vez Adolf Ogi.
swissinfo y agencias
Nacido en 1945, orginario de Mosnang, cantón San Gall, Walter Fust estudió Ciencias políticas y ocupó diversos cargos en la economía privada antes de entrar en 1975 al servicio diplomático de la Confederación Helvética.
Después de desempeñdo funciones en Bagdad y Tokio, fue nombrado en 1984 colaborador personal del consejero federal Kurt Furgler.
De 1986 a 1989, dirigió la Oficina Suiza para la Expansión Comercial (OSEC). En 1990 pasó a ser secretario general del Ministerio del Interior, a la sazón dirigida por Flavio Cotti, quien ocuparía luego la cartera de Asuntos Exteriores. Cotti fue quien designó a Fust director de la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación (COSUDE).
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