Suben a 4 los muertos en Estambul de una familia intoxicada por causas aún sin aclarar
Estambul, 17 nov (EFE).- El padre de una familia de turistas turco-alemanes, afectada por una intoxicación de origen aún desconocido, ha fallecido este lunes en Estambul, después de que en días anteriores murieran su esposa y dos hijos, en un caso que ha conmocionado Turquía.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, insistió en un discurso hoy que la investigación aún continúa y en no hay resultados oficiales, pero la prensa indica que la pista más firme es una intoxicación por un pesticida empleado en el hotel en el que se alojaba la familia.
Según el diario Cumhuriyet, una empresa de fumigaciones habría tratado un espacio del hotel con fosfuro de aluminio, una sustancia que al reaccionar con agua desarrolla humos tóxicos que pudieron entrar en la habitación de la familia por la ventilación del baño.
El martes pasado los cuatro miembros de la familia, que habían llegado de Alemania el domingo anterior, comenzaron a experimentar náuseas y vómitos, y acudieron al hospital al día siguiente.
Tras recibir un tratamiento con suero, todos fueron dados de alta y regresaron al hotel, pero por la noche los síntomas se agravaron y fueron trasladados en ambulancia a la clínica.
Los dos niños, de tres y seis años, murieron el jueves, la madre al día siguiente y el padre, que estaba en coma, ha fallecido hoy.
La investigación se centró primero en una posible intoxicación alimentaria, por lo que las autoridades precintaron el restaurante en el que la familia había cenado el martes y detuvieron al dueño y al cocinero del local, así como a un vendedor callejero de mejillones rellenos y a un vendedor de dulces.
Al no rastrearse otros clientes afectados de estos establecimientos, pero detectarse síntomas en otros dos turistas alojados en el mismo hotel, la policía evacuó y precintó este establecimiento el domingo.
También arrestó al dueño del hotel junto a varios trabajadores, así como al gerente y a un empleado de la empresa de fumigaciones, llevando el número de detenidos a once.
El caso ha abierto un amplio debate en Turquía sobre higiene alimentaria, al investigarse inicialmente una posible intoxicación por comida en mal estado.
Erdogan insistió hoy en que las autoridades turcas han llevado a cabo más de un millón de inspecciones de sanidad en el sector de la alimentación, trasladando 425 casos a la Fiscalía.
«Quiero expresar que no me parece correcto arrojar sospechas sobre nuestro sector gastronómico, mientras todavía no se hayan aclarado el caso de Estambul», concluyó el jefe de Estado. EFE
iut/as/psh