Sudán exige en la CIJ fin de apoyo de Emiratos a paramilitares en su “genocidio” en Darfur

Imane Rachidi

La Haya, 10 abr (EFE).- lEl Gobierno sudanés pidió hoy a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) medidas cautelares “urgentes” contra Emiratos para que ponga fin a su “amplio apoyo financiero, político y militar” a las Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) en su “campaña genocida” contra el pueblo masalit, un grupo étnico africano no árabe en Darfur, en el oeste de Sudán, desde 2023.

En una audiencia pública celebrada este jueves, un amplio equipo legal defendió, en representación de Sudán, que “no puede haber duda de que el pueblo masalit está siendo actualmente sometido a un genocidio” y “hay pruebas serias de que Emiratos está fallando en prevenirlo y es cómplice” de ello, señaló el jurista británico Eirik Bjorge.

Advirtió de que los “actos de genocidio y otros actos prohibidos” presuntamente cometidos desde 2023 contra los masalit “continúan hasta el día de hoy”, al igual que “el apoyo abierto de Emiratos a las FAR, a pesar de los hechos”.

Por ello, señaló, Sudán “no tiene otra opción que acudir a la Corte para solicitar medidas cautelares urgentes” para frenar el supuesto apoyo emiratí a las FAR, una milicia de sudaneses árabes liderada por un excomandante de los Janjaweed, el general Mohamed Hamdan Dagalo.

Por su parte, el ministro de Justicia en funciones de Sudán, Moawia Osman Mohamed Khair, advirtió de que “el genocidio en curso no habría sido posible sin la complicidad de Emiratos” y aseguró que el país árabe “sigue suministrando armas cada vez más pesadas en vuelos de carga” a través de Chad.

“El apoyo logístico directo y de otros tipos que Emiratos ha proporcionado y sigue proporcionando a las FAR y sus milicias afiliadas sigue siendo la principal fuerza impulsora detrás del genocidio que está ocurriendo, y que incluye asesinatos, violaciones, desplazamientos forzados, saqueos y destrucción de propiedades privadas y públicas”, señaló el ministro interino.

Bjorge explicó que fue “instrumental para la ejecución de la campaña de genocidio” por parte de las FAR desde junio de 2023 “asegurarse nuevas rutas de suministro de armas, equipos y logística para su uso en el conflicto” y “ahora pueden usar varios tipos de armas pesadas y sofisticadas, que jugaron un papel importante en la captura de El Geneina”, la capital del Estado de Darfur del Oeste.

También se refirió a la situación en la estratégica ciudad de Al Fasher, el último bastión del Ejército sudanés en Darfur y que está bajo asedio de las FAR desde hace casi un año.

“El actual asedio de El Fasher por las FAR está en riesgo serio de culminar en más actos de genocidio. En el último mes se han intensificado también los ataques de las FAR contra otros lugares de reunión en Darfur del Oeste y del Norte de miembros del pueblo masalit desplazados por el conflicto”, dijo.

Sudán también aseguró que un grupo de expertos sobre Sudán nombrados por el Consejo de Seguridad de la ONU evaluó las acusaciones de “una intensa rotación de aviones de carga provenientes del aeropuerto internacional de Abu Dabi”, aterrizando en Amdjarass, este del Chad, con “armas, municiones y equipo médico” para las FAR. Emiratos asegura que estos aviones eran “vuelos de cargo” que tenían “un propósito puramente humanitario”.

“No hay explicación plausible para estos transportes aéreos, excepto el apoyo con armas a las FAR. Nadie se deja engañar”, aseguró Bjorge.

Bjorge también acusó al Gobierno emiratí de “asistir” a las FAR “en el reclutamiento de mercenarios para apoyar el ataque” contra Al Fasher, entre los que, aseguró, había “ciudadanos colombianos, cuyos pasaportes (supuestamente confiscados tras una operación en noviembre pasado) contenían visados de entrada a Emiratos de los meses anteriores”.

Emiratos defenderá su posición esta tarde, antes de que los jueces puedan retirarse a deliberar sobre la necesidad de medidas cautelares, en una etapa previa a la evaluación del contenido del caso, que se centra en la acusación de Sudán contra Emiratos por supuestas violaciones de sus obligaciones bajo la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio (1948).

El conflicto estalló el 15 de abril de 2023 por el desacuerdo entre el Ejército y los paramilitares respecto a la inclusión de los segundos en el poder surgido tras el golpe de Estado de 2021, que acabó con el efímero intento de democratización del país tras el derrocamiento en 2019 del dictador Omar Al-Bashir. EFE

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