
Un pueblo sagrado de India en el centro de una investigación por cientos de desaparecidos
Nueva Delhi, 19 ago (EFE).- Un remoto y venerado pueblo de peregrinación en el sur de la India, Dharmasthala, se ha convertido en el epicentro de una investigación por el presunto asesinato y enterramiento clandestino de cientos de personas a lo largo de dos décadas, desatando una tormenta política, si bien no hay de momento pruebas concluyentes.
La crisis estalló el pasado 3 de julio, cuando un supuesto extrabajador de saneamiento del templo, cuya identidad está protegida, aseguró que entre 1995 y 2014 recibió órdenes de «supervisores» para enterrar en secreto los cuerpos de víctimas de asesinato.
Según su testimonio, la mayoría eran mujeres y niñas, muchas con signos de violación, pero también mendigos y personas sin hogar.
Su aparición más dramática fue el 11 de julio pasado, cuando se presentó ante un tribunal local vestido de negro y con una máscara para ocultar su rostro, un acto que le valió el apodo de «el hombre enmascarado» en los medios indios.
¿Qué ha encontrado la investigación?
El Gobierno del estado de Karnataka, donde se encuentra el templo, formó un Equipo Especial de Investigación (SIT) que ha llevado a cabo una intensa campaña de excavaciones en más de una docena de lugares señalados por el denunciante.
Sin embargo, los resultados han sido hasta ahora muy limitados, con posibles restos humanos encontrados solo en algunos de los lugares. La búsqueda en un punto donde el denunciante aseguró haber enterrado entre 70 y 80 cuerpos no arrojó ningún resultado, creando una brecha entre la escala de la denuncia y las pruebas físicas.
«Si el análisis químico indica rastros de ADN humano, la investigación tomaría un rumbo diferente. El SIT ha sido autorizado a decidir», afirmó ayer el gobierno regional en una declaración en el parlamento regional.
A pesar de la falta de pruebas, las acusaciones han ganado una enorme tracción en la opinión pública debido a un historial de muertes sin resolver en la zona.
Varias familias de personas desaparecidas en Dharmasthala en las últimas décadas han presentado nuevas denuncias ante el SIT, con la esperanza de que los casos sean reexaminados.
La tensión política
El partido Bharatiya Janata Party (BJP), del primer ministro indio Narendra Modi, acusa al opositor Partido del Congreso de orquestar una «campaña de desprestigio» contra una institución hindú.
El gobierno, por su parte, ha defendido la investigación mientras asegura que el templo no es el objetivo, mientras que la administración del templo ha pedido una investigación «justa y transparente».
Toda la investigación se encuentra ahora a la espera de los resultados de los análisis forenses de los restos y las muestras de suelo recogidas.
Dharmasthala, cuyo nombre significa «morada de la justicia», es uno de los centros de peregrinación más importantes del sur de la India, y su templo de 800 años de antigüedad está dedicado a la deidad hindú Manjunatha, una manifestación del dios Shiva.
El templo es administrado por una influyente familia de la fe jainista, y sus rituales son oficiados por sacerdotes vaishnavas, en una inusual convergencia de tres corrientes religiosas que lo ha consolidado como un símbolo de armonía y un destino para miles de devotos diariamente. EFE
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