Aborto y unión gay, temas que dividen en silencio a oposición de Nicaragua
Managua, 12 may (EFE).- Las principales razones de división entre los grupos opositores de Nicaragua no se limitan a razones políticas o ideológicas, sino también a otros temas subyacentes que podrían estar evitando la ansiada unidad de cara a las próximas elecciones generales, según dijo este miércoles el aspirante a la Presidencia George Henríquez Cayasso.
El aborto, la diversidad sexual, la ideología de género, el matrimonio gay, o la fe cristiana, son esos temas que, al menos en silencio, dividen a la oposición con una fuerza que parece superar su interés en evitar una nueva reelección del presidente Daniel Ortega, al que los diversos bloques opositores coinciden en tildar de «dictador».
Los partidos identificados como de centroderecha han advertido que no se unirán con grupos «que no respetan la vida», no comparten la fe católica, o que tienen su origen en la guerrilla marxista-sandinista.
Los partidos que han establecido reglas «morales» e «ideológicas» similares son el Partido Liberal Constitucionalista (PLC) el Partido Conservador (PC), y Ciudadanos por la Libertad (CxL).
Mientras los que se han dado por aludidos son el Partido Restauración Democrática (PRD), de perfil cristiano protestante, o el organismo Unidad Nacional Azul y Blanco, integrada por personas sin afiliaciones políticas, ONGs, incluidas feministas, y disidentes sandinistas.
Es un tema del que nadie hablaba hasta que Henríquez Cayasso dijo abiertamente que apoya las mujeres que quieran decidir sobre su cuerpo y que no tiene problemas si dos hombres deciden amarse.
RECLAMO PÚBLICO
El tema volvió al tapete público esta semana cuando el aspirante a la Presidencia por la Unidad Nacional Azul y Blanco, Félix Maradiaga, calificó de «ofensivo» que una facción disidente que integra CxL se haya negado a la unidad opositora porque en la contraparte había cristianos evangélicos.
El reclamo de Maradiaga, hombre católico casado con una mujer evangélica, llamó la atención porque se trata de un candidato que suele medir sus palabras y que se ha negado a tocar temas polémicos relacionados con la fe.
Incluso el presidente del PRD, reverendo Saturnino Cerrato, defendió a la comunidad LGBTI, al decir que «ellos también son nicaragüenses, tienen cédula, votan».
Para Henríquez Cayasso, uno de los pocos aspirantes a la Presidencia cuya escasez de recursos no le alcanza para montar una conferencia de prensa, el tema de fondo es la discriminación de parte de los otros grupos, algunos de los cuales tienen alianzas políticas con el sector empresarial.
«En definitiva en Nicaragua hay mucha discriminación, y mucho clasismo de parte de la clase política que ha estado en el poder en los últimos 40 años, eso lo pudimos ver después de mi postulación», dijo a Efe Henríquez Cayasso, el único aspirante presidencial treintañero, afrodescendiente, y de ideas abiertas.
Nada más presentarse como precandidato a la Presidencia en marzo pasado, Henríquez Cayasso fue objeto de críticas por su origen étnico y geográfico (costa Caribe), su estilo rafta, o por dirigirse a sus seguidores en su lengua materna, inglés creole, mientras brinda entrevistas en español.
«NEGATIVO PARA EL PAÍS»
Según el precandidato, un defensor de los derechos humanos con maestría en género, etnicidad y ciudadanía intercultural, «estas personas, estando en el poder, no han desconstruido patrones de comportamiento de hace 40 años, no podemos cambiar el país teniendo gente que piensa como antes».
Henríquez Cayasso rechazó que algunos partidos desconozcan a diferentes sectores de la población por sus creencias o género.
«De alguna manera ofende porque cómo van a liderar al país si sólo quieren conocer las necesidades de un sector, eso es negativo para el desarrollo de un país. Ahí está Costa Rica, algunos países de Europa, aceptan esas diferencias y no pasa nada», sostuvo.
El precandidato, quien dice que no cambiará su forma de pensar ni se cortará las rafta si ganase las elecciones, insistió en que los temas subyacentes de las elecciones nicaragüenses serán tocados tarde o temprano.
Por lo pronto, todos los políticos de la oposición, católicos y evangélicos, heterosexuales y homosexuales, machistas y feministas, incluso Henríquez Cayasso, están de acuerdo en un tema: evitar una nueva reelección de Ortega.EFE
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