Agencia alemana de inteligencia inaugura costosa sede en Berlín

La policía de Alemania monta guardia ante la nueva sede del Servicio Federal de Inteligencia (BND), en Berlín el 8 de febrero de 2019 afp_tickers

La jefa del gobierno de Alemania, Angela Merkel, inauguró este viernes en Berlín la nueva sede del Servicio Federal de Inteligencia (BND), en el corazón de la ciudad, en una obra que se tornó controvertida por su elevado costo.

La nueva sede es una fortaleza futurista que ocupa nada menos que 260.000 metros cuadrados y se alza en las proximidades de una zona de la ciudad donde pasaba el muro que separó a Berlín entre 1961 y 1989.

La obra tardó 11 años en ser completada. Tenía inicialmente un presupuesto de 720 millones de euros, pero al final la nueva fortaleza terminó costando unos 1.100 millones.

El BND, que emplea unas 6.500 personas, estaba basada desde hace medio siglo en la periferia de Múnich.

Merkel dijo este viernes estar convencida de que en el enfrentamiento de las nuevas amenazas mundiales «Alemania precisa, más que nunca, de un servicio de inteligencia fuerte y eficaz».

Entre esas nuevas amenazas, Merkel se refirió a la difusión de noticias falsas y a los ataques cibernéticos.

Las operaciones de interceptación telefónica y vigilancia digital permanecerán en Múnich, en una decisión fuertemente criticada por la oposición del Partido Verde y de la izquierda, quienes estiman que esas estructuras quedarán fuera del control de Berlín.

Merkel aseguró este viernes que el BND asegura que «millones de alemanes puedan vivir en seguridad», aunque admitió que los agentes «aún enfrentan la desconfianza de la población».

Los servicios alemanes de inteligencia se han visto envueltos en varios escándalos. En 2015 fueron acusados de espiar empresas europeas de defensa en beneficio de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) estadounidense.

Al mismo tiempo, no logró evitar que un teléfono celular personal de Merkel fuera interceptado por el espionaje estadounidense.