¿Burbuja de IA? Los expertos creen que esta vez es diferente a la crisis de las ‘puntocom’
Sarah Yáñez-Richards
Nueva York, 20 nov (EFE).- Las astronómicas valoraciones de empresas de inteligencia artificial (IA), que suponen cada vez un porcentaje mayor de las ganancias del mercado de valores estadounidense, y las sospechas de «financiación circular» en torno a empresas emergentes con pérdidas millonarias, como OpenAI, han disparado las alarmas ante una nueva burbuja.
Sin embargo, expertos como el catedrático de negocios y ciencia de datos de la Universidad de Nueva York e investigador de IA, Vasant Dhar, que vivió la crisis del 2000, aseguran que la situación que el mercado vive ahora es «muy diferente» a la burbuja puntocom de finales de los 90.
Dhar, que sufrió «significativamente» la crisis del 2000 porque tenía una «gran inversión en internet», explica a EFE que aquella burbuja fue inflada por «cientos de compañías nuevas», como Webvan, que no tenían ingresos y que entre «el 90 % y el 98 % de esas empresas quebraron; simplemente se fueron a pique».
Una burbuja repleta de titanes tecnológicos
No obstante, Dhar resalta que la burbuja actual no está siendo alimentada por cientos o miles de pequeñas empresas «que se hacen pasar por nuevas compañías de IA», sino que «la mayor parte ha sido impulsada por los grandes: Nvidia, Microsoft, Meta, Amazon, Google …».
Estos titanes de la tecnología invierten sus «ganancias reales» en infraestructura, lo que hace que haya «compañías de billones de dólares dominando el espacio» de la IA, según Dhar.
En sus resultados empresariales de ayer, Nvidia -fabricante de los chips informáticos que han impulsado el auge de la IA- superó las previsiones de ingresos, que aumentaron un 62 % hasta alcanzar los 57.010 millones de dólares interanuales, y publicó una previsión de ventas para el cuarto trimestre superior a la esperada.
«Se ha hablado mucho de una burbuja en la IA», declaró el director ejecutivo de Nvidia, Jensen Huang, a los inversores durante la presentación de resultados, y dijo que desde su punto de vista, ven «algo muy diferente».
Con respecto a un posible colapso de OpenAI, la empresa emergente estrella de esta vanguardista tecnología con su popular ChatGPT, Dhar sostiene que si esta empresa desapareciera mañana, no cambiaría la vida de nadie, ya que los usuarios migrarían a Claude (de Anthropic) o Gemini (de Google) y señala que ante una quiebra de la empresa en el mercado se vería un «hipo», pero no sería el fin del sector.
OpenAI aviva el fantasma de una burbuja de IA
OpenAI prevé acumular enormes pérdidas anuales, incluyendo aproximadamente 74.000 millones de dólares en pérdidas operativas solo en 2028, para luego obtener beneficios significativos en 2030, según documentos financieros obtenidos por The Wall Street Journal.
La compañía prevé un gasto total de aproximadamente 22.000 millones de dólares este año -en inversión en chips y centros de datos-, frente a unos ingresos de 13.000 millones, lo que resulta en una pérdida neta de 9.000 millones de dólares.
Otra de las preocupaciones que giran en torno a empresas como OpenAI es su «financiación circular», como el hecho de que Microsoft invierte en OpenAI, la cual a su vez se compromete a gastar miles de millones en la nube de Microsoft y en chips de Nvidia.
Dhar anota que está claro que existen acuerdos circulares y que las grandes empresas están invirtiendo gran parte de sus ganancias en centros de datos para la generación de esta infraestructura de la IA. «No están especulando a lo loco», recalca.
Esta semana, Sundar Pichai, director ejecutivo de Alphabet (matriz de Google), afirmó que todas las empresas pueden verse afectadas si estalla la burbuja de la IA.
El riesgo está en las ‘startups’
Pichai hizo estas observaciones tras la advertencia de Jamie Dimon, consejero delegado del banco estadounidense JP Morgan, quien declaró el mes pasado que la inversión en IA sería rentable, pero que parte del dinero invertido «probablemente se perdería».
Según Dhar, si existe una burbuja, no está en Google, sino en las «cientos o miles de pequeñas compañías» y «jóvenes de 20 años» que levantan millones de dólares en capital especulativo «con solo una idea» y sin un producto real.
Asimismo, destaca que la IA «no se va a ir», es una tecnología que lleva desarrollándose años y añade que, aunque se construya infraestructura en exceso, la demanda es tan fuerte que «eventualmente esa capacidad se usará».
Por su parte, el cofundador y consejero delegado de la plataforma de inversión eToro, Yoni Assia, quien dijo haber estudiado las burbujas durante su formación, aseguró que «así es como funcionan los mercados» y abogó por que los inversores se informen para que sean «conscientes» de esos riesgos. EFE
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