Burkina Faso enterrará los restos de Thomas Sankara el 23 de febrero

Uagadugú, 18 feb (EFE).- El entierro de los restos del expresidente de Burkina Faso Thomas Sankara, y de los doce colaboradores que murieron con él, se celebrará el 23 de febrero en el lugar en el que fueron asesinados, a pesar del desacuerdo de la familia Sankara con esa localización, anuncio el Gobierno burkinés.

«La inhumación de los restos mortales del Presidente Thomas Sankara y de sus doce compañeros (…) tendrá lugar el jueves 23 de febrero de 2023», informó a través de un comunicado difundido a última hora de ayer el portavoz del Gobierno, Jean Emmanuel Ouédraogo.

Según la nota, el lugar escogido es el emplazamiento del Memorial Thomas Sankara, antiguo Consejo de la Entente, el lugar donde fueron abatidos en la capital, Uagadugú.

«Esta elección se basa principalmente en imperativos socioculturales y de seguridad de interés nacional», señalaron las autoridades, al ponerse «a la disposición» de los parientes de los difuntos para informarles sobre los detalles.

Al entierro, que será un acto «íntimo» y no estará abierto al público, le seguirá una «ceremonia solemne de homenaje» a Sankara y sus acólitos el próximo 15 de febrero, en el aniversario de su muerte.

El Gobierno mantuvo así el lugar escogido originalmente a pesar de las quejas de la familia de Sankara, que calificó de «conflictivo y polémico» enterrar al exlíder burkinés en el mismo sitio donde fue asesinado y anunció que no participaría en la organización de la inhumación.

El pasado 3 de febrero, el Ejecutivo burkinés anunció la decisión de enterrar los restos de Sankara y sus compañeros en el lugar de su muerte tras «consultas en el seno de las Fuerzas Armadas (…) ampliadas a las familias de las víctimas, el Ayuntamiento de Uagadugú, las autoridades consuetudinarias y religiosas y el Comité Internacional del Memorial Thomas Sankara».

Sankara fue asesinado el 15 de octubre de 1987 a los 37 años, junto a doce de sus colaboradores, después de que un comando golpista, liderado por su sucesor Blaise Compaoré, asaltara su despacho.

El carismático líder destacó como un panafricanista y un revolucionario, inspirado por figuras como el entonces presidente de Cuba, Fidel Castro, o el guerrillero y político argentino nacionalizado cubano Ernesto «Che» Guevara.

Sankara había llegado al poder en 1983 en un golpe de Estado organizado junto a Compaoré, entonces su mejor amigo y compañero de armas.

Los restos fueron exhumados en mayo de 2015 en el marco de una investigación para realizar pruebas de ADN con el fin de identificar a los fallecidos y desvelar la causas de sus muertes.

La investigación sobre el asesinato estuvo bloqueada desde que Compaoré sustituyó a Sankara en la jefatura del Estado hasta octubre de 2014, cuando dimitió y se exilió en la vecina Costa de Marfil por las revueltas civiles acaecidas cuando intentó modificar la Constitución para mantenerse en el poder.

A pesar de que las pruebas de ADN tras la exhumación en 2015 fueron inconcluyentes, los expertos aseguraron que el cuerpo recibió varios disparos, lo que concordaba con el testimonio de testigos del asesinato de Sankara y dio esperanzas para la celebración del juicio.

Un tribunal militar inició en octubre de 2021 el histórico juicio por el asesinato de Sankara y sus doce compañeros y emitió su veredicto el pasado 6 de abril, sentenciando a cadena perpetua a los tres principales acusados del magnicidio, entre ellos Compaoré. EFE

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