‘Blues to Bop’ de nuevo en la ciudad de Lugano

El jueves 30 de agosto vuelve a Lugano, en el cantón del Tesino, el Festival Blues to Bop con un concierto en la playa de Morcote y las orquestas flotantes que deleitarán al auditorio desde la orilla del lago.
El centro de Lugano será anfitrión del Blues del viernes 31 de agosto al domingo 2 de septiembre. Cerrarán la manifestación los tradicionales conciertos gospel que, en esta ocasión, no se llevarán a cabo en la catedral de San Lorenzo (que está siendo restaurada) sino en la agradable plazuela de San Rocco.
El célebre Festival llega a la capital de Tesino, como cada año, hacia finales del verano para cerrar con broche de oro una estación rica en manifestaciones culturales y ocasiones de esparcimiento para la población local y visitantes del mundo entero.
En esta ocasión, la ciudad se transforma en una sala de fiestas gracias a las diferentes orquestas que se colocan en los cuatro palcos preparados en otras tantas plazas del centro para tocar música blues según diferentes expresiones de este género musical.
Se presenta desde el más antiguo y tradicional, que se apoya sobre todo en la voz humana, hasta el más sofisticado blues contemporáneo, contaminado con el gospel, funk, rap, soul, y también con el rock, sin hablar de los ritmos caribeños, del calypso a la salsa. Ritmos hijos, todos ellos, de mamá Africa y crecidos en difíciles condiciones de vida en las Américas.
Programa diversificado
Los fieles escuchas encontrarán este año una cartelera más variada de lo normal. El director artístico de la manifestación, el inglés transplantado en Tesino, Norman Hewitt, ha trabajado con entusiasmo para hacer llegar a la ciudad, por una parte, jóvenes promesas y, por otra, afirmados bluesistas del mundo entero.
Entre los primeros, destaca la jóven cantante Deborah Coleman, quien se presentará por primera vez en público en calidad de solista.
Las cuatro plazas estarán ocupadas por 40 grupos que se alternarán durante los 4 días. Entre los participantes vale la pena mencionar al pianista Dave ‘Boogie’ Keyes, un personaje muy amado por el público, solista de boogie-woogie; el grupo angloindio ‘Kelvin Bullen Blues Warp Band’, nacido el año pasado como resultado de una apuesta entre el líder del grupo y el director del Festival, Norman Hewitt, quien desafió a Kelvin a tocar música blues con instrumentos tradicionales de la India.
En ocasión de los cien años del nacimiento del gran Louis Armstrong, la Big Band ‘The Blue Feeling Orchestra’ dedicará el concierto del viernes al celebérrimo trompetista, y, el sábado, la orquesta se empeñará con el repertorio que ya tocaba la legendaria orquesta de Duke Ellington en el Cotton Club de New York.
En la cartelera la ‘Family Band’
Mencionamos también a la ‘Family Band’ del pastor Robert Randolph, quien, además de atender a sus feligreses en una congregación afroamericana pentecostal, toca gospel contemporáneo con su guitarra pedal-steel. Otro pastor musical es el aún jóven Eric Scott, quien ha creado un grupo gospel de voces escogidas, entre las que destaca la voz estupenda de Thelma Ramsey, cantante con más de 30 años de éxitos.
La Ramsey es apreciada por sus interpretaciones apasionadas y agresivas con las cuales inflama no sólo los ‘spirituals’ tradicionales, sino también los temas contemporáneos.
Entre los grupos que más han mezclado estilos para generar música contemporánea tenemos a los ‘All Mighty Senators’ que se originaron gracias al espíritu de protesta contra la música que se tocaba en la mayoría de los locales americanos, inventando un estilo influenciado por el rock y el soul y cuya caracterísitca dominante es la gran energía dinámica.
Digno de nota es el suizo Joe Colombo, quien, con sus escasos 26 años, ya es un huésped habitual del Festival Blues de Lugano.
Originario de los campos de algodón en los que los esclavos negros trabajaban, el blues ha conservado, sin embargo, una gran libertad y creatividad, sin ser domesticado, y pudiendo ser acompañado por otros ritmos más agresivos, como el bebop, sin perder su característica de «canto del alma», su «tristeza» y su carácter tan emocional. Con el Blues to Bop se crea una mezcla interesante y siempre en equilibrio entre dos registros del alma negra universal.
Lupita Avilés, Lugano

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