Israel ha utilizado «extensamente» bombas de racimo en Líbano, según ‘The Guardian’
Londres, 19 nov (EFE).- Israel ha utilizado «extensamente» municiones de racimo en bombardeos en Líbano, informó este miércoles en exclusiva el diario británico ‘The Guardian’, que publicó imágenes de supuestos explosivos que diversos expertos consultados identificaron como misiles con ojivas de racimo.
En las tres imágenes que se proporciona en la información se ve lo que cinco analistas consultados por el rotativo han identificado como dos tipos de municiones de racimo israelíes encontradas en los valles boscosos de Wadi Zibqin, Wadi Barghouz y Wadi Deir Siryan, al sur del río Litani, en el sur del país árabe, que ha sido precisamente la zona más golpeada por los bombardeos.
Se trata de misiles guiados M999 Barak Eitan de 155 milímetros y Ra’am Eitan de 227 milímetros, en los que sus carcasas presentan rombos amarillos serigrafiados que indican que el proyectil contiene submuniciones de alto poder explosivo.
Una de las instantáneas muestra la base de otro artefacto, en la que hay pegada «una cinta de nailon blanca» que se utiliza, según ‘The Guardian’, «para estabilizar y hacer girar las submuniciones», mientras que en otra se lee la palabra «racimo» escrita en hebreo.
Fuentes del ejército israelí no negaron ni confirmaron al diario británico el uso de estos misiles, y sostuvieron que solo utilizan «armas legales, de conformidad con el derecho internacional y mitigando el daño a los civiles».
Israel, que bombardeó este lunes el sur de Líbano, no está adherido a la Convención sobre municiones de racimo de 2008, a la que están adscritos 124 Estados que se comprometen a no utilizar, producir o transferir este tipo de municiones por el peligro que suponen para la población civil.
Las bombas de racimo, llamadas así porque están diseñadas para dispersar o liberar submuniciones explosivas de pequeño tamaño, dejan grandes áreas contaminadas con artefactos explosivos no detonados que pueden seguir siendo letales años después de un conflicto.
No es la primera vez que Israel es acusado del uso de bombas de racimo en Líbano: la organización Human Rights Watch ya lanzó la misma acusación en un informe del pasado enero, aunque no aportó pruebas documentales, y también en octubre de 2024 el grupo Hizbulá presentó la misma denuncia, y precisó que su uso se detectó en otras zonas distintas, identificadas entonces como Wadi al Hujayr, Jallet Raj y una zona boscosa ubicada al este de la ciudad de Alman. EFE
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