Japón señala que una intervención monetaria es «una posibilidad» ante la caída del yen
Tokio, 21 nov (EFE).- La ministra de Finanzas de Japón, Satsuki Katayama, afirmó este viernes que una intervención monetaria es «una posibilidad» debido a las rápidas fluctuaciones cambiarias, con el yen en mínimos de diez meses frente al dólar ante las expectativas de mayor gasto fiscal del Ejecutivo nipón.
El Gobierno japonés «tomará las medidas necesarias» para «responder a las fluctuaciones excesivas y a los movimientos caóticos del yen», afirmó en una rueda de prensa Katayama, en declaraciones recogidas por la agencia de noticias nipona Kyodo.
Katayama añadió que una intervención monetaria «es por supuesto una posibilidad», escalando las señales de inquietud del Gobierno japonés de los últimos días, una serie de comentarios similares a los que precedieron a las intervenciones de divisas más recientes de Tokio, en abril, mayo y julio de 2024.
Durante las operaciones de este viernes en la Bolsa de Tokio, la moneda se cambiaba en el entorno de los 157,34 yenes por dólar, su nivel más bajo desde enero. La moneda japonesa se encuentra también en mínimos históricos con el euro, y se movía a 181,55 unidades durante la sesión en Tokio.
La venta de yenes se ha intensificado en medio de la preocupación por la salud fiscal de Japón, cuyo nuevo Gobierno está ultimando un paquete de estímulo en medio de la persistente inflación y el estancamiento de los salarios reales.
Al mismo tiempo, las esperadas subidas de tipos del Banco de Japón (BoJ) continúan en pausa mientras el banco central analiza el impacto de los aranceles estadounidenses y la política económica del nuevo Ejecutivo japonés, lo que contribuye a la debilidad del yen.
El gobernador del BoJ, Kazuo Ueda, afirmó este viernes en una sesión parlamentaria que «es necesario tener presente que las fluctuaciones del tipo de cambio podrían afectar más fuertemente a los precios».
El banco central se ha mostrado favorable a subir los costos de endeudamiento como parte de sus esfuerzos para normalizar su política monetaria, si la economía y los precios evolucionan según sus metas, como viene sucediendo, pero Ueda ha advertido de que el impacto real de los aranceles en la economía japonesa aún no se ha materializado por completo y ha adoptado una postura cauta.
A este factor se ha sumado la llegada al poder de Takaichi, conocida por su postura fiscal moderada y defensora de una política monetaria expansiva, que se ha mostrado crítica con la senda de subidas de tipos que el BoJ emprendió en marzo de 2024. EFE
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