Japón reitera su preocupación por las «rápidas» fluctuaciones del yen
Tokio, 20 nov (EFE).- El Gobierno japonés reiteró este jueves su preocupación por las «rápidas» y «unilaterales» fluctuaciones cambiarias, en palabras del portavoz del Gabinete nipón, Minoru Kihara, cuando el yen toca mínimos de diez meses frente al dólar ante las expectativas de mayor gasto fiscal del Ejecutivo nipón.
Japón está monitorizando la moneda «con una alta sensación de urgencia», dijo este jueves Kihara durante su rueda de prensa diaria, en declaraciones recogidas por la agencia de noticias japonesa Kyodo.
Durante las operaciones de este jueves en la Bolsa de Tokio, la moneda se cambiaba en el entorno de los 157 yenes por dólar, su nivel más bajo desde enero.
Ya este miércoles, la ministra japonesa de Finanzas, Satsuki Katayama, admitió la preocupación del Gobierno por la debilidad del yen, que alcanzó la víspera un mínimo frente al euro, generando expectativas de una posible intervención de las autoridades para frenar movimientos bruscos.
La venta de yenes se ha intensificado en medio de la preocupación por la salud fiscal de Japón, cuyo nuevo Gobierno, liderado por la conservadora Sanae Takaichi, está ultimando un paquete de estímulo millonario en medio de la persistente inflación y el estancamiento de los salarios reales.
Al mismo tiempo, las esperadas subidas de tipos del Banco de Japón (BoJ) continúan en pausa mientras el banco central analiza el impacto de los aranceles estadounidenses y la política económica del nuevo Ejecutivo japonés, lo que contribuye a la debilidad del yen.
Este jueves, sin embargo, una de las integrantes de la junta del BoJ, Junko Koeda, insistió en la necesidad de continuar con las planeadas subidas del tipo de interés oficial, que continúa en el 0,5 %, para volver a un «estado de equilibrio», en un discurso recogido por Kyodo.
Katayama mantuvo este miércoles una reunión con el gobernador del BoJ, Kazuo Ueda, aunque según el medio económico Nikkei, que cita a fuentes cercanas, los responsables no discutieron en detalle la situación de la moneda, lo que contribuyó a la venta de yenes.
El banco central se ha mostrado favorable a subir los costos de endeudamiento como parte de sus esfuerzos para normalizar su política monetaria, si la economía y los precios evolucionan según sus metas, como viene sucediendo, pero Ueda ha advertido de que el impacto real de los aranceles en la economía japonesa aún no se ha materializado por completo y ha adoptado una postura cauta.
A este factor se ha sumado la llegada al poder de Takaichi, conocida por su postura fiscal moderada y defensora de una política monetaria expansiva, que se ha mostrado crítica con la senda de subidas de tipos que el BoJ emprendió en marzo de 2024.
El banco central japonés subió los tipos de interés por última vez el pasado enero, pero su ciclo de normalización se interrumpió tras el regreso a la Casa Blanca de Donald Trump y la agresiva política arancelaria que viene ejerciendo su Gobierno desde entonces. EFE
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