Kara-Murzá se muestra desafiante a una semana del fallo por alta traición

Moscú, 10 abr (EFE).- El opositor ruso Vladímir Kara-Murzá, en prisión preventiva desde hace un año y juzgado, entre otros cargos, por alta traición, aseguró hoy en el tribunal que no se arrepiente de nada, a una semana de que la Justicia dicte sentencia.

Su abogada, María Eismont, aseguró a la prensa que en sus últimas palabras su cliente había asegurado que «no se arrepiente de nada» y que «ama a Rusia», según informa el portal digital Mediazona.

Adelantó que, el próximo 17 de abril, el tribunal urbano de Moscú emitirá el fallo contra el opositor, para el que la Fiscalía pidió la pasada semana 25 años de prisión.

El juicio transcurre a puerta cerrada y sin la presencia por motivos de salud del procesado -perdió 17 kilos en los últimos doce meses-, quien fue acusado también de cooperar con países de la OTAN y difundir información falsa sobre el Ejército ruso en Ucrania.

Según la acusación, Kara-Murzá difundió “conscientemente información falsa” al acusar al Ejército ruso de bombardear zonas residenciales, hospitales y escuelas en Ucrania durante una intervención en marzo de 2022 en la Cámara de Representantes del Estado de Arizona, en EEUU.

Además, es acusado de alta traición, cargo castigado en este país con hasta 20 años de prisión, y de trabajar para una ONG declarada indeseable por la Justicia rusa.

Varias decenas de periodistas independientes exigieron hoy la libertad de Kara-Murzá en una carta, en la que acusan de «infundadas» y «cínicas» las acusaciones y califican de político el proceso judicial abierto contra el opositor.

«Kara-Murzá es un auténtico patriota que en los primeros días de la guerra ya se pronunció contra la agresión rusa (…). Pero hoy en día en Rusia abogar por la paz y el cese de la guerra es un crimen», señalan.

Denuncian que el actual proceso es un «claro ejemplo» del retorno de Rusia «a las prácticas estalinistas del terror político» y llaman a las autoridades a juzgar a asesinos y criminales y no a ciudadanos honrados y responsables.

Recientemente, los abogados del opositor informaron de que Kara-Murzá había sido diagnosticado en la cárcel con polineuropatía en extremidades inferiores como consecuencia de los dos envenenamientos que sufrió en 2015 y 2017.

Pese a su precario estado de salud, la Justicia rusa ha prolongado hasta agosto la prisión preventiva para el opositor, de 41 años, detenido en abril de 2022, declarado agente extranjero y considerado preso de conciencia por Amnistía Internacional.

Kara-Murzá sobrevivió a dos intentos de envenenamiento, en 2015 y 2017. Según el colectivo de investigación Bellingcat, con anterioridad había sido seguido por la misma unidad del Servicio Federal de Seguridad que luego envenenó al líder opositor Alexéi Navalni, que a su vez cumple ocho años de cárcel.

En octubre de 2022 fue distinguido con el Premio Václav Havel de Derechos Humanos 2022 otorgado por el Consejo de Europa.EFE

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