NRC: Las 10 crisis de desplazados más desatendidas del mundo reciben poca o ninguna ayuda
Nairobi, 3 jun (EFE).- Las diez crisis de desplazados más desatendidas del mundo, nueve de ellas en África y la otra en Honduras, «reciben poca o ninguna ayuda», lamentó este lunes el Consejo Noruego para los Refugiados (NRC, en inglés).
Según la organización, que publica cada año una clasificación a nivel global, estas crisis «nunca se convierten en el centro de atención de los esfuerzos de la diplomacia internacional».
Burkina Faso lidera por segunda vez consecutiva la lista correspondiente a 2023, que este año integran nueve países africanos además de Honduras, situado en la sexta posición.
Golpeado por la amenaza yihadista desde 2015 y después de haber encajado dos golpes de Estado en 2022, Burkina Faso alcanzó en 2023 la cifra récord de 707.000 nuevos desplazamientos dentro de sus fronteras.
Además, el número de muertos por la violencia en el país se duplicó hasta más de 8.400 muertos, mientras que el número de refugiados burkineses que buscaron seguridad en estados vecinos casi se triplicó, alcanzando un total de 148.317 personas.
A este país de África occidental le siguen en la lista, por orden, Camerún, República Democrática del Congo (RDC), Mali, Níger, Honduras, Sudán del Sur, República Centroafricana (RCA), Chad y Sudán.
El informe del NRC destaca la «calamidad» que está sucediendo en Sudán, sumergido en una guerra desde el 15 de abril de 2023, una «cruda advertencia de lo que ocurre cuando el mundo da la espalda a una crisis».
El conflicto en Sudán, que enfrenta al Ejército y al poderoso grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR), obligó a más de 10 millones de personas a huir de sus hogares, haciendo de ese país el escenario de la mayor crisis de desplazados internos del mundo, señaló la ONG.
El NRC también subrayó la entrada en la lista de nuevo tras cinco años de Níger, «antaño símbolo de estabilidad en África Occidental» y que, desde julio de 2023, está gobernado por una junta militar golpista que ha perdido el apoyo tanto de socios regionales como de los países occidentales.
El país se enfrenta a una crisis que incluye desastres climáticos, inseguridad alimentaria y epidemias, además de violencia por parte de grupos terroristas leales a Al Qaeda y al Estado Islámico (EI). Así, casi 4,3 millones de personas necesitaron ayuda humanitaria en 2023.
Por otro lado, Sudán del Sur, que en años anteriores sí figuró en la lista pero el pasado no, fue de nuevo incluido en séptimo lugar, debido a las crisis derivadas de la inestabilidad política y el conflicto intercomunitario, además de las fuertes inundaciones que agravaron la situación.
Alrededor de nueve millones de personas necesitaron ayuda humanitaria en este país, lo que supone en torno al 70 % de la población.
«La mayoría de las crisis recogidas en el informe de este año han aparecido en repetidas ocasiones (…) y muchas de las crisis olvidadas que aparecen en esta lista están interconectadas», concluyó el NRC.
«Un enfoque aislado de estas crisis puede que ya no sea suficiente», alertó la organización.
Esta clasificación anual fue creada por el NRC hace ocho años y se basa en tres criterios: falta de voluntad política internacional, falta de atención de los medios de comunicación y falta de financiación humanitaria. EFE
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