La mayoría de la población suiza quiere un mayor acercamiento a la OTAN, pero con límites claros
En Suiza, la situación política mundial se percibe con más pesimismo que nunca. El cambio en la percepción de la seguridad también influye en la opinión sobre la OTAN. Un estudio de la ETH de Zúrich muestra con detalle ese estado de ánimo.
La actual ministra de Defensa, Viola Amherd, tiene claro que Suiza y la OTAN deben cooperar más estrechamente. Una opinión que está causando polémica en la política nacional.
La ley suiza de neutralidad prohíbe la participación de este país en cualquier guerra librada entre otros Estados. Por ese motivo, Suiza no puede adherirse a una alianza de seguridad como la OTAN, ya que esta prevé un deber de asistencia en caso de guerra.
Sin embargo, no queda excluido el acercamiento a otros Estados u organizaciones supranacionales; de hecho, forma parte de la política de neutralidad de Suiza, que prevé expresamente alianzas con países afines. Suiza y la OTAN cooperan desde hace tiempo (por ejemplo, con la Asociación para la PazEnlace externo), y, además, desde el ataque ruso a Ucrania a principios de 2022 se ha producido un acercamiento instintivo.
El estudio «Seguridad 2024Enlace externo» realizado por la Academia Militar de la ETH de Zúrich (Escuela Politécnica Federal de Zúrich) y el Centro de Estudios de Seguridad (CSS) permite ahora hacerse una idea de cómo ve la población la cuestión de la política de seguridad en general, y qué opina de la cooperación internacional de Suiza.
El estado del mundo es motivo de preocupación
En primer lugar, el estudio revela que la población suiza es significativamente más pesimista sobre la situación política mundial que en años anteriores: sólo el 18% se muestra optimista sobre el futuro de la situación política mundial, lo que supone un 6% menos que un año antes. Según los autores, esto se debe principalmente a la guerra de Ucrania y a la guerra de Israel en Palestina.
En cambio, el 79% de las personas encuestadas se muestra optimista sobre el futuro de Suiza. Y el sentimiento general de seguridad en Suiza sigue siendo alto, con un 92% (-2%). Lo mismo cabe decir de la confianza en las instituciones públicas y las autoridades: la confianza general se sitúa por encima de la media con 6,8 puntos sobre 10 (ha aumentado ligeramente en +0,3).
Suiza y la OTAN
Uno de los temas centrales del estudio en cuestión es la OTAN. Más de la mitad de las personas encuestadas, concretamente el 53%, está a favor de estrechar los lazos con la alianza militar. Este porcentaje es significativamente superior a la media de los últimos diez años (43%).
Sin embargo, sólo una minoría de los encuestados (un 30%) estaría a favor de la adhesión. No obstante, también en este caso la tendencia es clara, ya que la media de los diez últimos años es del 23%.
Las preguntas específicas muestran que no hay temor a entrar en contacto con la Alianza. Por ejemplo, el 72% está a favor de colaborar con la OTAN en tecnologías militares o con fines militares. El 69% opina que Suiza debería centrarse principalmente en sistemas de armamento compatibles con la OTAN. Sin embargo, la mayoría no quiere que Suiza acoja eventos de la OTAN: un 58% se ha manifestado en contra.
La idea opuesta de la autonomía militar también ha ganado terreno recientemente (+6%), pero con un 39% a favor sigue estando muy por debajo de la media de diez años del 43%. La reciente decisión de Suiza de participar en la iniciativa europea Sky Shield, un sistema conjunto de defensa aérea, fue aprobada por el 62%.
En resumen, quienes han llevado a cabo el informe señalan que la cooperación política e institucional con la OTAN goza de una amplia aprobación siempre que se mantenga a nivel de conversaciones y planificación. Lo mismo ocurre con la cooperación tecnológica.
Cooperación internacional de Suiza
Aparte de la OTAN, la población suiza está a favor de la conexión internacional del país. No obstante, las voces aislacionistas se han hecho más fuertes desde el estallido de la guerra, aunque siguen siendo minoritarias.
Por ejemplo, el 82% (-1%) desearía una mayor cooperación económica con la UE. El 76% (-2%) está a favor de que Suiza desempeñe un papel mediador en los conflictos. Y el 60% (-4%) está a favor de que Suiza apoye las peticiones de la ONU. Todos los porcentajes están en línea con la media de la última década.
En cuanto a la ayuda al desarrollo, el 58% (-7%) opina que Suiza debería prestar más ayuda al desarrollo, porcentaje inferior a la media de los últimos diez años (64%). Sin embargo, y a pesar de los drásticos planes de austeridad del Parlamento, la ayuda al desarrollo sigue siendo un compromiso sólido.
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