El balance del presidente
El presidente de la Confederación Helvética, Moritz Leuenberger, pasa revista a su año presidencial y anuncia que se presentará a la reelección en 2007.
La principal motivación del ministro socialista es restablecer el principio de colegialidad en el seno del gabinete.
Moritz Leuenberger aún no está dispuesto a abandonar el Consejo Federal (gobierno). “Me volveré a presentar a la reelección del gobierno en diciembre de 2007”, declaró este martes ante la prensa, al hacer un balance de su año presidencial. Su principal motivación para seguir en el gabinete es “restablecer la colegialidad”.
El principio de la colegialidad en el que reposa el Consejo Federal está actualmente en tela de juicio “debido al comportamiento de algunos”, cuyos nombres el presidente helvético omitió citar.
“Acusar a algunos consejeros federales (ministros) en público iría en contra de mis convicciones”, respondió Leuenberger a los periodistas. “Este tipo de discusiones debe desarrollarse en el interior del gobierno y yo quiero atenerme a este principio”.
El Consejo Federal debe conservar su independencia por encima de los intereses de los partidos y preservar la cohesión nacional, señaló.
Presidencia rotativa
Si algunos ministros siguen manifestando una creciente tendencia a practicar una política partidista con fines electoralistas, Suiza tendrá que pensar en dotarse de un presidente único y renunciar a la presidencia rotativa que cada año pasa a uno de los siete miembros que integran el gobierno colegiado, declaró.
Los lazos de los consejeros federales con sus partidos respectivos son importantes, pero los miembros del gobierno no deben doblegarse a las decisiones de la formación política a la que están afiliados. El gobierno corre el riesgo de disgregarse si sus miembros no respetan el consenso político. Esto no debe suceder, subrayó Leuenberger, y menos aún en vista de las próximas elecciones legislativas federales previstas para 2007.
El presidente de la Confederación Helvética no quiso entrar en la polémica entre Pascal Couchepin y Christoph Blocher respecto a las declaraciones que éste hizo sobre los extranjeros y los suizos naturalizados que han cometido un delito. “Ya sucedieron cosas peores”, comentó lacónico.
Permanencia en el gobierno
El presidente helvético aseguró que no pretende permanecer en el Consejo Federal para “entorpecer el camino” a la derechista Unión Democrática del Centro (UDC) que ambiciona conquistar el Ministerio de Medioambiente, Transporte, Energía y Comunicación que encabeza Moritz Leuenberger. La situación podría cambiar en el caso de que se creara un ministerio para la investigación y la formación, recordó.
Moritz Leuenberger se mostró vago sobre si permanecerá toda la próxima legislatura en el gobierno. “En principio, uno es elegido para cuatro años”, pero no tiene la obligación de quedarse hasta el final. En su opinión, no existe una duración ideal para el mandato de un consejero federal. “Si uno se pregunta hasta qué edad hay que quedarse, yo no sería el primero que tendría que irse”, comentó con ironía el ministro socialista que acaba de cumplir 60 primaveras.
Por lo demás, Leuenberger se manifestó satisfecho de cómo se ha transcurrido su segundo mandato presidencial: “El primero, en 2001, estuvo ensombrecido por catástrofes; esta vez ha sido armonioso, pero muy cargado”, comentó.
Finalmente, el presidente de Suiza hizo énfasis en la creciente importancia que adquieren las relaciones con el extranjero.
swissinfo y agencias
Moritz Leuenberger nació en 1946.
Hijo de un pastor protestante comienza a interesarse por la política en 1968, mientras cursa estudios de Derecho en la Universidad de Zúrich.
A los 26 años preside la sección ciudadanía del Partido Socialista.
1974-1983: consejero municipal de Zúrich
1979: elegido diputado nacional
1991-1995: miembro del gobierno cantonal de Zúrich
1995: miembro del gobierno federal
Está al frente del Ministerio de Medioambiente, Transporte, Energía y Comunicación.
Fue presidente de Suiza en 2001 y 2006.
El presidente de la Confederación Helvética es elegido solamente para un mandato de un año que ocupa de forma rotativa uno de los siete miembros que integran el gobierno colegiado.
Su función es el de ‘primus inter pares’ (primero entre iguales). El presidente dirige las reuniones del gabinete y tienen una función de representar al país, pero no poderes especiales.
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