El seguro social requiere una ‘perfusión’ urgente
Las finanzas del seguro por incapacidad (AI) se encuentran en un estado catastrófico. El próximo domingo, 27 de septiembre, el pueblo está invitado a aceptar un aumento temporal del IVA para colmar las pérdidas.
Pero los opositores desean reducir los costos antes de aceptar cualquier financiamiento adicional.
En casi 15 años, la situación financiera del AI no ha dejado de empeorar. En 1996, el seguro acusaba un déficit anual de “solamente” 427 millones de francos, que pasó a 820 millones en 2000 y a 1.500 millones a mediados de los años 2000.
Obviamente, con tal déficit, la deuda acumulada del AI también tomó el ascensor. De 1.500 millones en 1996, superó la barra de los 13.000 millones. A largo plazo, esta evolución podría poner en peligro el seguro de vejez, puesto que los dos seguros están vinculados en un mismo fondo de compensación.
Una primera reacción
Este aumento de los gastos obedece a diversos factores. Por ejemplo, al aumento de los costos de la salud. Pero en los últimos años, también se ha planteado el problema del número de ingresos, en particular debido a la aparición cada vez más frecuentes de ingresos de incapacidad por motivos psíquicos. Actualmente, alrededor de 300.000 personas cuentan con una renta.
Ante esta situación, el mundo político decidió reaccionar. La 5ª revisión del AI, que entró en vigor el 1 de enero de 2008, endureció las condiciones para la atribución de rentas e instauró una serie de medidas para favorecer el retorno al mundo laboral de las personas inválidas.
Pero esta 5ª revisión no basta por sí sola para cubrir las deudas del AI. Por ello el Parlamento aceptó un aumento del impuesto al valor agregado (IVA) para colmar el agujero. Dado que la tasa del IVA está inscrita en la Constitución, debe someterse, en forma obligatoria, al pueblo y a los cantones.
Una medida urgente
Este aumento temporal del IVA no bastará para solucionar de manera definitiva el problema financiero. Por ello, los parlamentarios se preparan para una 6ª revisión del AI.
Esta gran obra, que podría durar varios años, tendría que garantizar la permanencia del seguro por incapacidad. Entre las medidas consideradas, estaría la de recortar las rentas atribuidas desde años atrás. Las rentas concedidas por razones psíquicas están especialmente en el colimador.
La 6ª revisión permitirá colocar de nueva cuenta los seguros sobre rieles.
Pero para una mayoría de parlamentarios, la situación financiera del AI es demasiado grave para esperar resultados. Por ello, la izquierda en su conjunto, así como una gran parte de la derecha, apoyan el aumento provisional del IVA.
“La medida es indispensable, ya que el AI está en déficit desde hace varios años”, explica al diputado socialista Stéphane Rossini. “Es insostenible. Si no se encuentra financiamiento adicional, se puede temer una disminución masiva de las prestaciones de aquí a cuatro o cinco años, lo que causará exclusiones y demandas de ayuda social.”
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Seguro en caso de Invalidez
El arado por delante de los bueyes
En realidad, la principal oposición a esta financiación adicional procede de las filas de la Unión Democrática del Centro (UDC/derecha conservadora). Por principio, este partido es apenas favorable a los aumentos de impuestos. Y lo es aún menos cuando el aumento previsto del IVA se produciría en pleno marasmo económico.
La UDC preconiza pues el saneamiento del AI antes de concederle fondos suplementarios. “Pensamos que debemos actuar prioritariamente con los gastos”, explica el diputado Jean-François Rime. “Somos conscientes de que, más tarde, será quizá necesario encontrar una solución de financiamiento adicional parcial, pero no es por allí por donde debemos comenzar.”
“Con un aumento del IVA, se pone una escayola sobre una pierna de madera, no se soluciona ningún problema”, prosigue el representante de la UDC. En resumen, para la derecha conservadora, colmar el agujero financiero de este seguro antes de corregir los factores que condujeron a excavarlo equivale “a poner el arado antes de los bueyes.”
Una cuestión urgente
El actual estado financiero del AI casi no deja dudas sobre la necesidad de aportarle recursos financieros. Pero los opositores al financiamiento adicional dejan la puerta abierta a tal solución.
La cuestión que se plantea verdaderamente el 27 de septiembre se refiere al carácter urgente de la medida. La situación es tan grave que es necesario actuar sin esperar o es necesario más bien solucionar los problemas del seguro antes de inyectar fondos. Al pueblo de decidir el próximo domingo.
Olivier Pauchard, swissinfo.ch
(Traducción: Marcela Águila Rubín)
La tasa normal del IVA, actualmente de 7,6%, será aumentada en 0,4 puntos.
El alza será en cambio menor para la tasa reducida que se aplica a los libros, a los medicamentos y la alimentación. Actualmente de 2,4%, este porcentaje reducido pasará al 2,5%.
La tasa especial de 3,6% que se aplica a la industria hotelera, será aumentada en 0,2 puntos.
Inicialmente, se preveía que en caso de aceptación por el pueblo, este aumento del IVA entrara en vigor el 1 de enero próximo. Pero en la sesión de verano, el Parlamento aceptó ‘in extremis’ prorrogarlo al 1 de enero de 2011.
Los parlamentarios se mostraron sensibles a los argumentos de los medios económicos que consideran impropio el incremento impositivo en este período de crisis.
El lapso del incremento será de siete años.
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