Exposiciones: Suiza se autoconfirma
La Exposición Nacional 2027 ya se prepara en el Este helvético. La pasada, de 2002, se antojaba un caos, nació con fórceps y finalmente fue un éxito. Estos eventos son momentos de “autoconfirmación colectiva” para los suizos, dice el filósofo Georg Kohler.
“Las exposiciones nacionales son, en cierto modo, una demostración del espíritu momentáneo del país. Suiza, cada 25 o 30 años, busca realizar este tipo de autoconfirmación colectiva”, indica el profesor emérito.
La razón: “Suiza se constituye por regiones completamente distintas desde el punto de vista cultural, lingüístico y geográfico. Por ello requerimos de este tipo de esfuerzo explícito para responder a las cuestiones de qué nos mantiene unidos y cómo se guarda esa autodeterminación colectiva bajo la suposición de que se trata de una identidad culturalmente frágil. Esto forma parte de Suiza desde la segunda mitad del Siglo XIX”.
Tras la caída del Muro de Berlín, la autoconfianza, la definición de país de neutralidad armada y la definición de pertenencia a Occidente de Suiza se “rompieron”, considera Kohler: Esa autocomprensión que funcionó bien entre 1945 y 1990, no se adaptó más al cambio mundial que después se produjo”.
De ahí la necesidad de una exposición nacional “ya que el proceso de redefinición de Suiza en el periodo posterior al 1990 está lejos de concluirse».
Tensiones entre las Suizas de habla francesa y alemana
El deseo de mejorar la cohesión nacional marcó el inicio de lo que finalmente resultó ser la Expo 02. En una decisión histórica, el Parlamento aprobó en el inicio de la década de los 90, la realización de una exposición nacional en 1998, en el 150 aniversario del Estado moderno suizo.
Poco antes, la región helvética de expresión alemana, la parte en el Este, había derrotado a la Suiza de habla francesa en el referendo sobre la adhesión del país al otrora Espacio Económico Europeo; la compañía aérea nacional Swissair había cancelado los vuelos a partir de Ginebra y el Cantón de Zúrich lanzaba un debate sobre la introducción del inglés en la escuela primaria, en lugar del francés. Eso creó tensiones entre las regiones lingüísticas del país.
Controversia, proceso normal
A la apertura de la Expo 02 precedieron largas discusiones durante todo un año. La fecha de realización debió ser pospuesta varias veces, todo el equipo administrativo fue sustituido y el presupuesto global, reducido.
Y pese a todo ello, la gran cita tuvo lugar con más de 10.300.000 visitas. Un éxito. Los medios, que anteriormente criticaron su organización, concluyeron que este encuentro fue “el espejo del país y de la vida moderna”, y festejaron la arquitectura espectacular que surgió con ella y los encuentros que produjo en su seno entre los suizos de habla alemana y los de expresión francesa.
Pero la controversia ha existido en todas las Expos helvéticas. La “Landi” de 1939 también vivió pospuestas, sobre todo porque los campesinos rechazaban entonces que la manifestación se realizara en la “ciudad roja” de Zúrich. Al final, quedó en la historia como un clímax patriótico.
El proyecto de una exposición nacional en Suiza oriental en 2027 aún no está consolidado, pero ya los cantones participantes, Appenzell Rodas Exteriores, San Gall y Turgovia han aceptado un anteproyecto. A finales de este año se debe alcanzar una decisión concreta sobre lo que será la Expo 27.
Adiós a la idea de la fiesta del Gotardo
No obstante, el proyecto de Marco Solari, director de Turismo del cantón italofono del Tesino, fracasó. La idea era realizar la exposición en torno al macizo del Gotardo, y en ella estaban implicados los cantones del Tesino, el Valais, Uri y los Grisones.
Solari expresó que las razones de este naufragio fueron “los intereses divergentes de los cantones involucrados y la cautela de los cantones de montaña con relación a las grandes iniciativas”.
Solarí quería vincular la exposición con la apertura de la conexión ferroviaria trasalpina a través del macizo del Gotardo, una obra centenaria de importancia continental. “Apenas el túnel acaba de ser construido y comenzaron las objeciones de que ya se habían hecho gastos millonarios a causa de su construcción como para utilizar más dinero para una fiesta. Festejar en este contexto es un poco difícil”, dice Solari, y considera:
“El suizo no es un gran visionario. Ama lo práctico, lo pragmático, lo pequeño”.
Pero Solari está convencido de que habrá una nueva exposición nacional si la región implicada, la parte oriental de Suiza, realmente así lo quiere. “Eso tendrá también sentido. Se trata de un encuentro físico que puede generar mucho en tiempos en los que todos se sientan detrás de un ordenador. Tiene una gran importancia.“
La Expo 02 fue la sexta realizada en Suiza y tuvo lugar del 15 de mayo al 20 de octubre de 2002 en la Región de los Tres Lagos, Neuchâtel, Murten y Biel, en la planicie helvética.
Durante 159 días, 39 exposiciones y 13.500 manifestaciones convirtieron a la Expo 02 en el centro cultural de Suiza.
Contó con un presupuesto total de 1.600 millones de francos.
Las anteriores Expos se realizaron en Zúrich (1883 y 1939), Ginebra (1896), Berna (1914) y Lausana (1964).
(Traducción: Patricia Islas)
En cumplimiento de los estándares JTI
Mostrar más: SWI swissinfo.ch, certificado por la JTI
Puede encontrar todos nuestros debates aquí y participar en las discusiones.
Si quiere iniciar una conversación sobre un tema planteado en este artículo o quiere informar de errores factuales, envíenos un correo electrónico a spanish@swissinfo.ch.