Alcalde de Portland quiere agentes federales fuera de esta agitada ciudad de EEUU
El alcalde de Portland, Ted Wheeler, exigió la retirada de los efectivos federales de esta ciudad del noroeste de Estados Unidos, acusándolos de hacer escalar peligrosamente la conflictiva situación local con tácticas abusivas e inconstitucionales contra los manifestantes.
«Lo que está sucediendo aquí es que tenemos docenas, si no cientos, de tropas federales que descienden sobre nuestra ciudad. Lo que están haciendo es intensificar la situación», denunció Wheeler en el programa «Stage of Union» (Estado de la Unión) de la cadena CNN.
El alcalde sostuvo que los agentes de cuerpos federales enviados a la ciudad habían intensificado un enfrentamiento de larga data entre los manifestantes y la policía con tácticas que incluían sacar a la gente de las calles en camionetas sin identificación y sin presentar al momento un documento en el que conste su condición.
«Su presencia aquí en realidad está llevando a más violencia y más vandalismo. Y no está ayudando a la situación en absoluto. No se los quiere aquí. No los hemos pedido aquí. De hecho, queremos que se vayan», expresó.
Estas acusaciones de Ted Wheeler siguieron a otra noche de protestas en esta ciudad del estado de Oregón, en la que incluso fue incendiado un edificio de la asociación policial.
El fiscal general de Oregón y la Unión Estadounidense de Libertades Civiles presentaron una demanda el viernes por la noche contra el gobierno federal, acusándolo de sobrepasar sus poderes y de herir o amenazar a manifestantes pacíficos.
El despliegue de oficiales federales con uniformes de camuflaje la semana pasada siguió a las amenazas del presidente de Estados Unidos, el republicano Donald Trump, de usar el poder federal para restablecer el orden después de un enfrentamiento de semanas entre manifestantes y policías.
Las protestas de Portland han sido parte de una ola nacional contra la brutalidad policial y el racismo derivada del asesinato en mayo de George Floyd, un hombre negro que murió cuando un oficial de policía se arrodilló en su cuello durante casi nueve minutos con la intención de inmovilizarlo.
Este domingo Trump tuiteó que el gobierno federal «intenta ayudar a Portland, no dañarla».
«Sus líderes han perdido, durante meses, control sobre los anarquistas y agitadores», aseguró el mandatario.