Arresto domiciliario a activista indio acusado de incitar a la violencia

Nueva Delhi, 10 nov (EFE).- El Tribunal Supremo de la India determinó este jueves el arresto domiciliario por motivos médicos al activista Gautam Navlakha, detenido en prisión desde 2020 acusado de instigar a la violencia durante un evento en favor de los intocables o dalits.

Navlakha, de 70 años de edad, deberá ser transferido en las próximas 48 horas debido a su frágil estado de salud por orden del máximo órgano judicial de la India, que revisará la orden dentro de un mes.

«No tiene antecedentes penales más allá de este caso en su contra (…). Pensamos que se debe permitir el arresto domiciliario, al menos, para empezar, por un período de un mes», indicó la sala durante una audiencia, según la orden divulgada por medios indios.

De acuerdo con el medio especializado Live Law, la medida sustitutiva otorgada hoy a Navlakha deberá ser ejecutada con rigurosas restricciones de seguridad, sin acceso a internet, y limitadas comunicaciones.

El activista deberá además hacer un depósito de unos 3.500 dólares para los gastos que implicaría mantener oficiales de seguridad en su domicilio.

El activista está siendo procesado en un caso relacionado con los choques entre intocables, los miembros del escalafón más bajo del sistema de castas hindú, y radicales de esta religión ocurridos entre el 31 de diciembre de 2017 y el 1 de enero de 2018 en la localidad occidental de Bhima Koregaon, que dejaron un muerto y decenas de heridos.

Los dalits celebraban allí el 200 aniversario de la batalla de Koregaon, donde soldados intocables a las órdenes de los británicos derrotaron a un ejército formado por miembros de la comunidad maratha, de estatus social superior.

De acuerdo con la acusación, Navlakha y otros prominentes activistas instigaron la violencia comunitaria con sus discursos en la víspera de aquel evento.

Más de una docena de personas fueron detenidas entre 2018 y 2020 por el caso, entre ellos el destacado activista y sacerdote jesuita de 84 años Stan Swamy, que murió el año pasado tras contraer coronavirus en la cárcel.

Las acusaciones de este mediático caso incluyen cargos por vínculos con el proscrito CPI-M, organización detrás de la guerrilla de corte maoísta, que continúa activa tras medio siglo de operaciones en el país, así como participar en una presunta trama para matar al primer ministro, Narendra Modi. EFE

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