El Gobierno luso aprueba un paquete de medidas para retener el talento joven en Portugal

Lisboa, 23 may (EFE).- El Gobierno portugués aprobó este jueves un paquete de medidas para retener el talento joven en Portugal y que no tenga que emigrar a otros países por los bajos salarios y la carestía, como una tasa máxima del 15 % del impuesto sobre la renta hasta los 35 años de edad.

Así lo señaló el primer ministro luso, Luís Montenegro (centroderecha), en una rueda de prensa tras una reunión del Ejecutivo, que esta semana se produjo en Braga, en el norte del país.

Destacó que este paquete es «para dar esperanza a los jóvenes portugueses para que puedan permanecer en Portugal y para aprovechar las cualificaciones que muchos obtienen con gran y esfuerzo y sacrificio».

«Nosotros, los portugueses; nosotros, el Gobierno; nosotros, la comunidad, necesitamos de los jóvenes portugueses en Portugal para tener más futuro», dijo el primer ministro.

Entre esas medidas figura un tope máximo del 15 % del impuesto sobre la renta de los jóvenes hasta los 35 años, lo que, precisó Montenegro, «se traduce en el pago de un tercio del impuesto sobre los ingresos de los jóvenes» hasta esa edad.

De esta manera, dependiendo de sus rendimientos, pasarán a pagar una tasa entre el 4,4 % y el 15 %, si bien, como el primer ministro subrayó, la mayoría de ellos cobran por debajo del tercer escalón fiscal, por lo que la mayor parte tendrá que abonar una tasa de entre el 4,4 % y «el 7 u el 8 %».

Sobre el acceso de los menores de 35 años a la vivienda, el Gobierno dio luz verde a su exención del pago del Impuesto Municipal sobre Transmisiones Patrimoniales Onerosas (IMT), un tributo que se abona a los ayuntamientos donde se ubiquen los inmuebles sujetos a estos impuestos, y de las tasas a la compra de la primera vivienda, cuando el precio de las propiedades adquiridas no sea superior a los 316.772 euros.

Montenegro también anunció «un mecanismo de garantía pública» de hasta el 15 % del valor de los inmuebles para los jóvenes de 35 años, con un límite de adquisición de hasta 450.000 euros, y un refuerzo de los alojamientos estudiantiles con 700 nuevas camas para el próximo año lectivo.

Asimismo, el Gobierno quiere ampliar las bolsas de estudio para trabajadores y alumnos y reforzar los medios para la salud mental y física de los jóvenes.

Todo ello para que los jóvenes se queden, porque como resumió Montenegro: «el mensaje principal es que vale la pena vivir en Portugal». EFE

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