
El líder golpista de Madagascar nombra a un empresario como nuevo primer ministro
Nairobi, 20 oct (EFE).- El líder del reciente golpe de Estado en Madagascar, coronel Michael Randrianirina, investido el pasado viernes como presidente, nombró este lunes como nuevo primer ministro al empresario Herintsalama Rajaonarivelo.
Rajaonarivelo, presidente del consejo de administración de BNI, el principal banco malgache, fue designado como jefe del Gobierno en un acto emitido por la Presidencia de la Refundación de la República de Madagascar en la red social Facebook.
El jefe de Estado explicó su elección por las «competencias, la experiencia pero también los contactos», especialmente con organizaciones internacionales, de este hombre de negocios.
De hecho, Rajaonarivelo ha trabajado como consultor internacional para el Banco Mundial (BMA), la Unión Europea (UE), la Secretaría General de los países ACP (África, Caribe y Pacífico), el Mercado Común del África Oriental y Meridional (COMESA) o la Comunidad de Desarrollo del África Meridional (SADC), entre otros.
Randrianirina juró el pasado viernes como «presidente para la refundación de la República de Madagascar» y prometió una «reconstrucción nacional» en este país insular del sudeste de África.
El coronel lidera el Cuerpo de Administración de Personal y Servicios del Ejército de Tierra (CAPSAT), la poderosa unidad militar de élite que derrocó el pasado día 14 al presidente Andry Raojelina, quien ha huido del país.
Randrianirina anunció ese día, desde el Palacio Ambotsirohitra, sede de la Presidencia en la capital, Antananarivo, la supresión de la Constitución y la toma del poder en respuesta a la grave crisis generada por las protestas populares desde el pasado 25 de septiembre.
Randrianirina adelantó que se creará un consejo compuesto por el Ejército, la Gendarmería y la Policía Nacional, al que se podrán incorporar civiles, que dispondrá de un plazo máximo de dos años para «reconstruir los cimientos de la nación».
Asimismo, aseguró que, dentro de ese proceso de transición, «se celebrará un referéndum constitucional».
En su discurso de investidura, el coronel subrayó que «la generación Z, con el apoyo de la población, ha salido a las calles para exigir la reconstrucción nacional. También exigen la resolución de los problemas socioeconómicos».
El golpe ha sido recibido con júbilo por los manifestantes pero la comunidad internacional ha condenado el levantamiento militar.
Madagascar atraviesa una profunda crisis desde el 25 de septiembre, cuando estallaron masivas protestas impulsadas por jóvenes de la generación Z indignados por los constantes cortes de electricidad y agua.
Las movilizaciones evolucionaron hacia un movimiento antigubernamental que reclamaba la dimisión de Rajoelina, acusado de corrupción, nepotismo y malversación de fondos públicos, y que se resistía a abandonar el poder pese a la presión en las calles.
Antes de la asonada, Madagascar había experimentado tres golpes de Estado desde su independencia de Francia: 1972, 1975 y 2009.
El CAPSAT ya participó en el golpe de 2009, que derribó al entonces presidente, Marc Ravalomanana, y permitió llegar por primera vez al poder a Rajoelina. EFE
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