El Davos del Foro Económico Mundial
El World Economic Forum (WEF) vio sus orígenes en Davos hace 38 años. La ciudad alpina más elevada de Europa junto con sus 13.000 habitantes acogen sin mayor reparo este encuentro de alto nivel.
El Foro se abre a la era de la sociedad de la información pero es firme en el carácter privado de sus encuentros. Para los medios resulta un gran festín “donde sólo podemos comer el pan y la mantequilla”.
El sol brilla sobre el paisaje nevado de la estación alpina de Davos, a apenas dos horas de Zúrich, sendero principal de la procesión de los 2.500 participantes en la edición número 38 del Foro Económico Mundial (WEF, su sigla en inglés).
Pero si a los pesos pesados de la economía y la política nos referimos, el camino es por aire. Este sábado, 26 de enero, y el día de la apertura oficial son los dos días de mayor tráfico de taxis privados, según explica Andreas Meier, al frente de Air Grischa, una de las varias empresas de alquiler de transporte aéreo.
“En esas jornadas alquilamos unos 20 o 25 helicópteros”. Un viaje desde el aeropuerto de Zúrich cuesta unos 10.000 francos. “Esta clientela prefiere aparatos de doble motor, lo que duplica el precio”, agrega Meier. Para este empresario grisón el WEF representa “una forma de salvar un mes de poco movimiento”.
Tres controles
Los ‘helitaxis’ que sobrevuelan la región se suman al coro de hélices y motores aéreos de la seguridad militar. “Es lo único un poco molesto”, asegura un turista checo mientras realiza esquí de fondo a unos 200 metros de distancia de una zona de aterrizaje.
Él llegó en coche a Davos: “Hacen controles después de Zúrich. Allí tuve que sacar todo el equipaje del vehículo y después hubo otros dos retenes en los pueblos de Küblis y Wolfgang. Y ayer por la noche al caminar me detuvieron para preguntarme qué buscaba; pero eso no me representa problemas. Esto ha cambiado. A principios de los 70, durante el segundo o tercer Foro, vi pasear por aquí a Simon Peres, mientras que en el Centro de Congresos había sólo un par de guardias”.
Más seguridad que participantes del WEF
En las calles predominan automóviles costosos con chóferes, patrullas, gente apurada con el gafete del WEF caminando hacia el foro y policías del cantón, de la ciudad, guardias civiles… ¿Habrá dos o tres vigilantes por cada uno de los 2.500 participantes del evento? “Eso no podemos decirlo debido a nuestro concepto de seguridad”, estima Ciril Lombriser de la Policía Cantonal Grisona.
Lo que sí se sabe es que en el WEF de 2007 participaron en promedio 3.400 soldados cada uno de los cinco días del WEF, no obstante, “este año aún no hay detalles precisos” indica Stefan Hofer, portavoz de Defensa.
Calificada de manifestación de carácter extraordinario por las autoridades helvéticas, está permitido utilizar hasta 5.000 soldados en los operativos de apoyo a la policía y a la seguridad privada apostada en los hoteles donde pernoctan los magnates.
Policías de otros cantones, de Alemania y Liechtenstein también colaboran. Así que ‘el poder de innovar a través de la colaboración’, lema del WEF, se aplica mejor en su periferia pues dentro la voz cantante es otra:
“Esta vez ha sido la recesión la que está marcando el ritmo de Davos, del Foro Económico Mundial en 2008. Es la inquietud en las mesas de trabajo, en los pasillos”, comenta la periodista Andrea Ornelas, enviada especial del diario mexicano ‘El Economista’.
En Davos con YouTube
El acceso al común de la gente al WEF a través de videos “que sí se presentan en las reuniones del foro”, es un camino interesante en esta era de la sociedad de la información, opina Ornelas, pero “al mismo tiempo tienes la paradoja de permitir que los medios vengan a la cobertura de esta reunión, con una gran riqueza informativa en la cuál el 85 o el 90% de las reuniones son privadas y cerradas a la prensa”.
Para la asidua visitante del WEF desde 1994 “es como tener un gran y suculento bufet del que solamente puedes probar el pan y la mantequilla”.
Constata también que en el WEF “existe una apertura interesante hacia distintos sectores, justamente con gente que está vinculada a proyectos sociales”.
Es el caso de Ariel Zylbersztjn, nombrado por la Fundación Schwab como el Emprendedor Social 2007 de México. Con su compañía Cinepop proyecta de manera gratuita filmes con pantallas inflables en zonas poco favorecidas con el respaldo financiero de instituciones y empresas que buscan ganarse el visto bueno de esa clientela potencial. Pero Ariel Zylbersztjn asegura que sólo se trata de empresas con carácter social.
Más de diez millones de francos para el sector hotelero
Sobre los beneficios de acoger el WEF 2008, Cornelia Lindner, al frente de la Oficina de Turismo de Davos se apoya en cifras de hace siete años: “Se trata de grandes cantidades que deben adaptarse, pero un estudio encomendado en 2001 al la Universidad de St. Gallen señala que Suiza durante el WEF tiene una ganancia de 41, 8 millones de francos. De ese total, 24,2 millones se concentran en el cantón de los Grisones, 22,7 millones en Davos, y en el sector hotelero hay un volumen de ganancias de entre 10 y 11 millones de francos.”
Las calles se ven desoladas en las horas de las reuniones del Foro. Una vendedora de artículos deportivos constata: “En nuestra tienda hay muy pocos clientes, pues en Davos solo hay participantes del WEF”.
“En otros años era mejor, pero ahora es menos porque a la gente ya no le da tiempo de hacer compras. No tienen tiempo en cinco días y cientos de citas”, lamenta el propietario de un comercio de objetos musicales.
¿No le molesta la realización del WEF en la ciudad?: “Hay dos partidos en Davos, dos tercios están por el WEF y un tercio en contra debido a que las calles están cerradas, los helicópteros se escuchan todo el día, pero solo se trata de una semana, mientras que el nombre de Davos da la vuelta al mundo sin tener que pagar nada en publicidad.”
“Sí, esta semana tiene que tener lugar, se puede, después ya todo vuelve a la tranquilidad. Antes era distinto, no había tanto tráfico ni tantas medidas de seguridad, hoy sí. Antes venían las damas e iban de compras mientras que sus esposos asistían al WEF, pero ahora todo es distinto debido a la seguridad”, opina una usuaria del transporte público, paciente a pesar de la larga espera para que fluya el tráfico, detenido por las decenas de autos que recogen a los magnates del Centro de Convenciones.
El chofer del autobús añade entonces: “No, no, el Foro no nos molesta para nada. Sí debe haber WEF. Es como el obligado cafecito del ama de casa, lo necesita siempre, como nosotros también al WEF”.
swissinfo, Patricia Islas Züttel, Davos
Otras manifestaciones como la entrega de los reconocimientos negativos a malos ejemplos empresariales de la Mirada Pública de Davos y el Foro Abierto de Davos se llevan a cabo de forma paralela al WEF.
El presidente de Suiza está invitado a participar el sábado en el podio del Foro Abierto de Davos 2008 ‘¿Se requiere de más crecimiento económico para mayor sostenibilidad?’, organizado por la Unión Suiza de Iglesias Evangélicas y el propio WEF por octava ocasión.
También este sábado, 26 de enero, tiene lugar una demostración anti-WEF en Davos.
Además, este día, designado como la Jornada de Acción Global del Foro Social Mundial, se organizan encuentros públicos en varias ciudades del mundo, incluida de nuevo Berna, donde hace una semana se produjeron enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y los participantes de la manifestación.
Davos es la ciudad más elevada de los Alpes y ubicada al noreste del territorio helvético, en el cantón de los Grisones,.
El atractivo de Davos inició en los años 1880, 1890, en la época de la propagación de la tuberculosis.
Muchos pacientes llegaron al lugar reconocido por su clima clemente y sus días de sol todo el año, gracias a situarse a 1.560 metros sobre el nivel del mar. Se decía que el aire puro les hacía bien a los enfermos.
El descubrimiento de la penicilina (1928) y su aplicación terapéutica provocó una disminución del número de pacientes que se dirigían a Davos.
Inició entonces la actividad turística (estación de esquí de fondo y de montaña) y como sede de varias instituciones, entre ellas, el Instituto Suizo de Investigación de Aludes, también se convirtió en una sede predilecta en Suiza para la realización de congresos.
Congresos científicos, médicos y de otras especialidades tienen lugar en el Centro de Congresos de Davos.
Para recibir a los 2.500 invitados provenientes de 88 países al Foro Económico Mundial, la zona del Centro de Congresos debe ser ampliada con 4.000 metros cuadarados adicionales de infraestructura provisional.
La Oficina de Turismo de Davos tiene un registro de 5.226 camas de hotel y 13.500 camas en el sector de la parahotelería (departamentos de vacaciones y alojamiento en albergues para grupos).
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