Junior Lake, un ejemplo de durabilidad y consistencia en el béisbol dominicano
Santo Domingo, 24 nov (EFE).- Con 15 temporadas a sus espaldas, Junior Lake se ha constituido en un ejemplo de durabilidad y consistencia, colocándose entre los jugadores de mejor rendimiento en la historia de la Liga de Béisbol Profesional de la República Dominicana (Lidom).
En un recorrido que inició con las Estrellas Orientales en el año 2012 y que en la actualidad lo ha llevado a vestir la franela de los Leones del Escogido, Lake ha demostrado ser uno de los jugadores más completos que han pisado el terreno de juego en el béisbol invernal.
Al arribar a este lunes, Lake contabiliza 500 imparables en su carrera en la serie regular del campeonato local, siendo apenas el jugador número 21 en acumular dicha cifra en el béisbol dominicano, un resultado impulsado por su amor y dedicación al juego.
“Vale la pena el esfuerzo, el trabajo y la dedicación”, ha expresado Lake sobre su amplio recorrido de 15 años en el máximo nivel del béisbol dominicano.
Pero el aporte en el terreno no se detiene solo en los indiscutibles que ha conectado, Lake también se ha encargado de darle valor a cada una de las herramientas que adornan su juego.
El estelar jardinero de 35 años ha puesto de manifiesto el poder de su madero y se encuentra a un cuadrangular de alcanzar los 40 jonrones, lo que lo convertirá en el décimo sexto pelotero con esa cantidad de tablazos de vuelta completa en su carrera en Lidom.
A falta de seis bases robadas para ser el quinto con 130 estafas en su paso por el béisbol invernal, Lake ha logrado pisar el plato 297 veces en esta trayectoria, lo que lo sitúa a tres anotaciones de convertirse en el décimo tercer jugador con 300 vueltas anotadas en todos los tiempos en la serie regular del torneo dominicano.
“Uno simplemente trabaja para el día a día, lo que Dios le pone a uno es el talento y uno tiene que confiar, y seguir adelante”, expresa Lake sobre la manera en la que ha logrado mantenerse siendo un jugador productivo por más de década y media.
“Uno trabaja para eso. De verdad que estoy agradecido con Dios”, afirma Lake, quien precisó, que, aunque siempre piensa en grande, nunca imaginó que llegaría a alcanzar el estatus del que disfruta en la historia de la Lidom.
Lake, quien en la actual temporada batea para .282, con dos jonrones y 10 carreras empujadas, no duda en señalar que más allá de sus logros personales, el objetivo de él y sus compañeros se centra en retener el título de campeones con los Leones del Escogido.
“Estamos trabajando para conseguir más victorias y seguir enfocado en el objetivo que nosotros tenemos”, sostuvo Lake. EFE
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