
Las acciones de protesta contra el pasado colonial continúan en Bélgica

Las acciones de protesta contra el pasado colonial en Bélgica continuaron este viernes con el derribo de una estatua del rey Leopoldo II y el ataque con pintura roja a otra del rey Balduino, a semanas del 60º aniversario de la independencia del Congo.
Un grupo de activistas derribó durante la noche la escultura del Leopoldo II en la comuna bruselense de Auderghem, una acción grabada por las cámaras de la cadena pública francófona RTBF.
«Existen demasiados símbolos del colonialismo en Bruselas. Hace años que militamos y que intentamos hacernos oír. Tenemos la impresión de predicar en el desierto», explica uno de los activistas a los periodistas.
Las placas con el nombre de la avenida Leopoldo II amanecieron pintadas de rojo, así como el busto del rey Balduino, bajo cuyo reinado se independizaron las colonias belgas, cerca de la catedral de Bruselas, en pleno corazón de la capital.
Las manifestaciones contra el racismo y la violencia policial, a raíz de la muerte a manos de un policía del afroamericano George Floyd en Estados Unidos, intensificaron el debate sobre sobre la figura de Lepoldo II.
Apodado el «rey constructor», el soberano entre 1865 y 1909 es un «héroe para algunos, pero también un verdugo», «mató a más de 10 millones de congoleños», asegura el grupo «Reparemos la Historia», que pide la retirada de sus estatuas.
Varios monumentos sobre el soberano, uno de los personajes más controvertidos de la historia de Bélgica, fueron atacados en Bruselas, Amberes y Ostende con pintura roja, símbolo de la sangre de los congoleños asesinados durante el período colonial.
La controversia sobre Leopoldo II, que gestionó como propiedad privada el Congo durante muchos años, incomoda incluso a sus descendientes, indicó el historiador Vincent Dujardin, de la Universidad de Lovaina, al diario Le Soir.
Balduino, tío del actual rey Felipe y casado con la española Fabiola de Mora y Aragón, fue el último monarca en hablar de forma positiva sobre Leopoldo II en 1960, aunque, según Dujardin, «ignoraba visiblemente el alcance del lado oscuro de la colonización».
Su hermano Alberto II, que le sucedió en el trono entre 1993 y 2013, «apenas estuvo involucrado en el Congo durante su reinado» y Felipe, el actual soberano, «no intervino en este tema», precisó.
En una entrevista al grupo Sudpresse, el príncipe Lorenzo, hermano de Felipe y 13º en la línea de sucesión, declaró que el rey Leopoldo II nunca fue al Congo en persona. «No sé cómo pudo hacer sufrir a la gente allí», agregó.