Marchas y piquetes culminan la tercera jornada de protestas contra los recortes en Bélgica
Bruselas, 26 nov (EFE).- Miles de personas se movilizaron este miércoles en Bruselas y otras ciudades de Bélgica para protestar contra las políticas de austeridad y la reforma de las pensiones que planea el Gobierno belga, en paralelo a una huelga que afectó a todos los sectores y provocó la práctica paralización del país, con lo que culminó la triple jornada de paros organizada esta semana por los sindicatos.
Las protestas se iniciaron el pasado lunes, con una huelga del transporte público que afectó a todas las regiones y en particular a Bruselas, donde prácticamente no hubo circulación de metro, tranvías ni autobuses durante toda la jornada.
El martes se sumaron las protestas en el sector público, incluidas escuelas, hospitales y administraciones. Y este miércoles los paros se dieron además en empresas de todos los sectores, públicas y privadas, y afectaron incluso a los aeropuertos de Bruselas y de Charleroi (sur del país), de donde ningún vuelo despegó hoy.
Marchas
En la capital belga tuvo lugar una manifestación que discurrió por las calles colindantes al barrio europeo, donde se desplegaron pancartas con eslóganes como «Stop Arizona», en referencia a la coalición que gobierna en Bélgica, y una concentración en Mont des Ars, en pleno centro de la ciudad, en protesta contra los recortes previstos en el sector cultural, que discurrió en un ambiente a la vez festivo y combativo e incluyó discursos y actuaciones.
También los trabajadores del hogar salieron a la calle en Bruselas para protestar y reclamar unas remuneraciones justas, informó la agencia Belga.
Otras marchas se produjeron en ciudades como Lieja, Namur y Gante.
Acuerdo presupuestario
El acuerdo presupuestario que el Gobierno federal alcanzó en la noche del domingo al lunes, que permitirá a Bélgica un ahorro total de 9.200 millones de euros, distribuidos entre ingresos y gastos, para 2029, y con el que se pretende cumplir con la senda de gasto público pactada con la Comisión Europea, no calmó a los sindicatos, que consideraron la huelga «más relevante que nunca».
«Durante meses, el gobierno de Arizona (que incluye a los partidos N-VA, Vooruit, CD&V, Les Engagés y MR) ha estado librando un ataque organizado contra los servicios públicos, y en particular contra la función pública federal. Este acuerdo presupuestario añade sal a la herida», dijo el lunes la CGSP, el sindicato socialista de servicios públicos.
Al final de la jornada de este miércoles, sindicatos como la sección de Lieja de la CSC celebraron una «huelga histórica» como «uno de los días de mayor movilización social de los últimos años».
Entre las medidas clave del acuerdo sobre el presupuesto se encuentra un aumento gradual de los impuestos especiales sobre el gas natural residencial y una reducción de los impuestos especiales sobre la electricidad residencial, con la que se pretende reducir los costes energéticos para empresas y ciudadanos.
Habrá también un incremento del IVA, del 6 % al 12 %, sobre ciertos productos (alojamiento en hoteles y campings, abonos deportivos, comida para llevar y pesticidas), aunque disminuirá el de las bebidas no alcohólicas, del 12 % al 6 %.
“Estos esfuerzos no son agradables, pero sirven al interés general”, dijo este miércoles el primer ministro belga, Bart De Wever, ante el Parlamento.
Con ese pacto indicó que el Gobierno pretende “reducir a la mitad los costes relacionados con el envejecimiento en un horizonte de 40 años”. EFE
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