
Proyectos ‘fantasma’ y corrupción en el control de inundaciones indignan a Filipinas
Manila, 20 ago (EFE).- Un reguero de millonarios proyectos para controlar inundaciones, finalizados sobre el papel pero inexistentes o de pésima calidad sobre el terreno, y la sombra de la corrupción indignan a Filipinas, con el presidente, Ferdinand Marcos Jr., declarándose este miércoles «furioso» y el Senado investigando a las agencias gubernamentales encargadas de desarrollarlos.
«No se hizo nada, ni siquiera un solo día de trabajo», constató Marcos Jr. a los medios de comunicación, desde un proyecto supuestamente finalizado para controlar las crecidas de un río en la provincia norteña de Bulacán.
Concedido a la empresa Syms Construction Trading por 55,7 millones de pesos (casi 826.500 euros), el proyecto fue declarado como completado en junio de 2025 por el Departamento de Obras Públicas y Autopistas de Filipinas (DPWH, en inglés).
Esta infraestructura es tan solo un ejemplo de los muchos proyectos ‘fantasma’ que existen actualmente en Filipinas, reconoció ayer el DPWH al ser cuestionado por un comité del Senado, en un país que cada año se enfrenta a la furia de tifones y otros desastres meteorológicos exacerbados por el cambio climático.
«Parece que en los últimos años, el número de zonas inundadas por las riadas ha seguido aumentando a pesar de los miles de millones de pesos que se han invertido en proyectos de control de inundaciones», destacó el senador Rodante Marcoleta el martes, al arranque de esta investigación por un comité especial de la cámara alta del Congreso.
Otro senador, Raffy Tulfo, afirmó por su parte que tan solo el 13,5% de los fondos destinados a estos proyectos son dedicados a su construcción. El resto se queda en los bolsillos de funcionarios y contratistas, dijo.
Marcos Jr., hijo del dictador fallecido de nombre homónimo acusado de saquear más de 10.000 millones de dólares durante sus 21 años en el poder, publicó la semana pasada una lista con quince contratistas que se hicieron con el 20 % del presupuesto para proyectos de control de inundaciones desde que inició su mandato en 2022.
El mandatario afirmó que se trata de una situación «perturbadora», sin llegar a calificar de corruptas a estas firmas y a los funcionarios responsables de adjudicar los proyectos.
Medios como el filipino Rappler, han denunciado los fuertes vínculos que unen a estas empresas de infraestructura con algunos de los políticos más influyentes del país, ya sea como fundadores o por estar dirigidos por familiares, o por tratarse de grandes donantes a sus campañas. Incluyendo en el propio Senado encargado de investigar la corrupción, destacó el medio.
El archipiélago ocupa el puesto 114 de 180 en el último Índice de Percepción de la Corrupción (IPC) elaborado por Transparencia Internacional (TI). EFE
daa/raa/lab
(foto)(vídeo)