
Ribera apunta a presión para «mirar a otro lado» pese a más evidencias de cambio climático
Bruselas, 15 jul (EFE).- La vicepresidenta ejecutiva de la Comisión Europea Teresa Ribera señaló este martes la «paradoja» de que crece la «presión para mirar a otro lado» ante las mayores evidencias del cambio climático y de sus impactos «más devastadores» en Europa y otras regiones del mundo.
«Vivimos en una paradoja. Cada año la evidencia se hace más fuerte. Los impactos son más devastadores. Y, sin embargo, la presión para mirar hacia otro lado, para retrasar, para fingir que no es urgente, crece en muchos lugares», dijo la vicepresidenta ejecutiva para una Transición Limpia, Justa y Competitiva en su discurso inaugural de la ceremonia de conmemoración del Día de la UE para las Víctimas de la Crisis Climática Global.
Una ceremonia celebrada en la sede de la Comisión Europea por tercer año consecutivo y que se instauró por primera vez tras las devastadoras inundaciones que azotaron Europa Central, especialmente Bélgica, Alemania y Francia en 2021.
Ribera apeló a honrar a las víctimas con «honestidad» y «pensando en lo que podemos hacer» para afrontar una realidad, que los «alarmantes» datos científicos muestran de forma inexorable: «2023 fue el peor año en cuanto a incendios forestales en la historia europea, 2024 fue el año más cálido jamás registrado» y, en junio de 2025, la temperatura del agua del mar Mediterráneo superó los 30,5 grados».
«Hemos visto incendios devastadores en Grecia, para llegar a otros grandes desastres climáticos, en Bélgica, en Valencia», continuó.
Ribera reconoció que «es un desafío, es difícil cambiar la forma en que vivimos, la forma en que entendemos la prosperidad, el desarrollo, la forma en que producimos, la forma en que consumimos. Pero es aún más preocupante, más inquietante, no hacerlo», advirtió.
«La negación no puede ser sustituida por demoras. El clima no esperará un momento mejor», afirmó la vicepresidenta comunitaria, que apeló a mantener los objetivos en la lucha contra el cambio climático y a establecer sistemas de alerta temprana y preparación.
La Unión Europea necesita, aseveró, estar preparada para adaptarse a un clima diferente y, por esa razón, tiene que «preparar la primera Ley Europea de Adaptación al Cambio Climático».
«Necesitamos preparar a los sectores para que se preparen para lo que ya está sucediendo, para proteger a nuestra gente y para asegurar nuestras infraestructuras», declaró Ribera, porque -añadió- «la pregunta ya no es si puede ocurrir un desastre, sino si estamos preparados cuando ocurra».
En el homenaje a los fallecidos y afectados por la crisis climática participaron también el ministro danés de Clima, Energía y Servicios Públicos, Lars Aagaard, cuyo país ostenta la presidencia de turno del Consejo de la Unión Europea, y el presidente de la Comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria del Parlamento Europeo, Antonio Decaro.
Benjamin Van Bunderen Robberechts, representante de las víctimas del clima y joven activista climático, compartió su historia personal sobre cómo el cambio climático y las inundaciones belgas de 2021 afectaron su propia vida o la de sus seres más cercanos.
El continente europeo se está calentando al doble de ritmo que los demás continentes, según la Comisión Europea.
Bruselas recordó que los ciudadanos de la UE apoyan firmemente la acción climática en Europa, como lo demuestra el último Eurobarómetro del Clima 2025 del 30 de junio, en el que «una gran mayoría de europeos cree que el cambio climático es un problema grave». EFE
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